𝐓𝐇𝐄 𝐔𝐍𝐓𝐎𝐋𝐃 𝐒𝐓𝐎𝐑𝐘▬𝐒𝐞𝐠𝐮𝐧𝐝𝐚 𝐓𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚 [𝐏.𝐄]

007

Hoy era el gran día, el día que todos sabrían que Ruvellis seria adoptado por esos dos dioses que tenían como gobernantes, pero no solo seria adoptado, si no que también sería nombrado como príncipe heredero.

Eso significa que esos nobles empezarían lentamente a mostrar sus verdaderos colores, como el duque Jena, que se había mantenido quieto, después de que hades había hecho una "limpieza" entre los nobles.

—¡La princesa es tan hermosa! — aduló una sirvienta.

—¡Nuestra princesa es la mas hermosa! — apoyó otra.

—¡Si! ¡Nuestra princesa es alguien hermosa!

Adulaban las mucamas que veían a athanasia lista para ese día. Su vestido blanco, pero con decoración de diamantes, y una frazada que en sus orillas tenia la decoración de un bordado hecho de oró. En la frazada de atrás también tenía la decoración del símbolo del imperio también bordado con hilo de oró.

—¡Nuestra princesa opacara a todas las Lady's del imperio!

—¡La princesa es tan bella!

—¡La princesa llamara la atención de todos los jóvenes en la ceremonia!

Athanasia solamente sonrió, al igual que lily y Leah que estaban a sus lados, dándoles los últimos retoques en su peinado que a pesar que era simple, tenia unos broches de oro que tenían incrustados unos pequeños diamantes. Cortesía de Hera que se los había regalados.

—Listo, nuestra princesa es hermosa — dijo lily, que se puso detrás de athanasia que se encontraba mirándose en el espejo, ambas sonrieron.

—Mi niña — persefone entro a la habitación para hablar con su pequeña hija.

—Saludos a la Luna del imperio, su majestad la emperatriz — rápidamente la servidumbre la saludo mostrando sus respetos.

Ella solamente hizo un ademan con la mano, dando entender que se enderezaran.

—Mi pequeña estas tan hermosa — con cariño acuno con su mano la mejilla de la pequeña rubia.

—Mamá gracias. Tu también te vez hermosa.

—¡Nuestra emperatriz y la princesa son tan hermosas!

—¡Era de esperarse de las diosas!

—¡Son hermosas!

Madre e hija sonrieron por los halagos de la servidumbre.

Mientras tanto en otra habitación.

—¿Nervioso? — Ruvellis miró con algo de sorpresa al emperador, hades lo miraba cruzado de brazos.

—U-Un poco — respondió con algo de timidez, le era algo difícil interactuar con ese dios.

Con persefone y athanasia era fácil de hablar con ellas, pero hades era otro tema. No mentiría le tiene algo de miedo.

—Me tienes miedo ¿cierto? — lo miró esperando una respuesta.

—Un poco.

Hades solamente avanzado hacia el y para sorpresa de Ruvellis, hades posó su mano en su cabeza y le dio tres leves palmadas para después retirarla. Ambos se vieron uno con calma y el otro con sorpresa, y mas sorpresa cuando vio al emperador sonreír.

—Serás mi hijo, dentro de unos minutos, yo no soy alguien que maté a mis hijos, aunque no comparta sangre, no quería decir que te trataré mal. Yo te daré la atención y amor de un padre Sientete orgulloso hijo mío — dicho esto se dio la vuelta para irse, pero la voz de Ruvellis lo hizo que se detuviera unos pequeños momentos.