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su auto olía a él. kihyun aspiraba con esmero para que todo aquél aroma agradable entrara por sus fosas nasales, era como embriagarse por segunda vez pero con algo mil veces más delicioso.
estaba todo muy pulcro, parecía nuevo. los asientos eran muy cómodos, se preguntó qué tan lindo sería dormir allí durante un viaje nocturno.

- abre la ventana, la brisa te hará bien. - sugirió hoseok, dándole una rápida mirada para no despistarse de la carretera. kihyun obedeció, por supuesto que sí.

- ¿vives solo o tienes compañía? - preguntó siguiendo con la ronda de preguntas. la cabeza comenzaba a darle vueltas, y se maldijo por haber bebido aquellas copas.

de todos modos, agradecía haber compartido las últimas dos con él, porque sí, antes de su llegada había estado bebiendo solo preso de la ansiedad que le daba verse con una persona tan hermosa como era wonho. hyungwon definitivamente iba a matarlo, pero se aseguró de enviarle un mensaje diciendo que se había ido del lugar con un muy buen acompañante, para no preocuparlo. sin embargo no obtuvo respuesta, al parecer estaba ocupado cuidando a minhyuk o conociendo a alguien.

- solo. mis padres están fuera de la ciudad. tuve un par de roomates algunas veces pero no funcionó, creo que no sirvo para vivir en compañía. aunque ahora mi madre está en casa, me visita de vez en cuando. - se rió. - ¿y tú? -

un nuevo mareo vino a él, no supo si por el alcohol en su sangre o por la armoniosa risa de hoseok. esperaba que la segunda.

- realmente luces como una persona que no le gusta vivir con otros. - destacó. - yo también vivo solo. - cortó la oración ahí, sin ganas de agregar nada respecto a su padre o a su triste (sarcasmo) historia familiar.

permanecieron en silencio. kihyun miraba por la ventana las casas pasar a velocidad, mareándolo. y se preguntaba, nuevamente se preguntaba, cómo sería despertar todos los días con el bonito rostro de hoseok a su lado. definitivamente algo nuevo, ya no estaba acostumbrado a tener a alguien en su casa por más de una noche o dos. hyungwon y minhyuk iban de vez en cuando, pero no era lo mismo. aún así estaba curioso, quería abrazarlo mientras dormía, y eso ahora era parte de su extensa lista de deseos referentes a la existencia de aquél chico.

el perfume del auto, o bueno, el aroma de hoseok se sintió más fuerte que antes y un nuevo mareo lo invadió. el estómago le dio mil vueltas en un segundo, amenazando con expulsar todo lo que había ingerido las últimas horas. colocó su mano en la rodilla de hoseok, y habló.

- oye, hoseok. para el auto, voy a potar. - soltó, y el mencionado pegó una frenada rápida al costado de la calle mirándolo con los ojos bien abiertos.

kihyun abrió la puerta impulsando su cuerpo hacia afuera y en ese mismo instante vomitó todos los cócteles, la pizza y probablemente también el almuerzo. odiaba vomitar por estar ebrio, porque luego de hacerlo venía el dolor de cabeza y él sólo quería disfrutar de la noche con wonho. no quería un insoportable dolor de cabeza que arruinara su "noche perfecta con el chico perfecto."

hoseok palmó su espalda un par de veces en un mimo o en muestra de apoyo.

- espérame aquí, iré por agua y una aspirina. -

lo esperó, por supuesto. dejó la puerta del auto abierta, respirando hondo para que el viento frío de la madrugada lo espabilara aún más. no podía permitirse mostrarse así de ebrio y desganado frente a wonho, mucho menos siendo su tercer encuentro.

pronto lo tuvo frente a él, y bebió rápido aquella pequeña cápsula para la resaca. al menos así se sentiría mejor más rápido. también retuvo un par de tragos en la boca para escupirlos luego en un árbol, queriendo sacarse el repugnante gusto a vómito.

capricho demencial - kiho monsta xDonde viven las historias. Descúbrelo ahora