Le dió un último sorbo a su batido de fresas y sonrió ampliamente.
Su humor cambio con un batido y una lectura.
—¿Estás mejor?—jimin asintió cerrando el libro que tenía en sus manos y lo dejo sobre la mesa.
—Lamento mi cara de pocos amigos durante todo el día.
—Descuida jimin, me sorprende que no te quedaste en casa.
—No me hicieron nada, gracias a dios llego ese señor.
—No era un señor, jimin.
—Lo se, pero... Con esa pinta que lleva parece un señor.
—Solo se viste de traje... No tiene nada de malo.— el más bajo se encogio de hombros.
— Sus feromonas eran muy fuertes.
—Si, no nos hacercamos por eso.
—¿Cómo puedes aguantar su olor tan fuerte?.
—Y yo que voy a saber. ¿Saben que? Me voy, me alegraron el día y con eso mis ganas de faltar al trabajo se fueron.
—Hoy iré por ti.
—No, Tae. Voy a estar bien, no es necesario que vengas. Además mira— de su mochila saco un gas pimienta— me lo compré en la farmacia de aquí enfrente.
Los mejores amigos de jimin quedaron boquiabierto.
—Deacuerdo, ¿Tienes batería verdad?
—Sip, igual lo pondré a cargar en el trabajo.
—Bien, sabes que si no quieres caminar me llamas. No importa si estoy cagando, me llamas.
La carcajada de jimin y hoseok no tardó en aparecer llamando la atención de algunos alumnos.
Salieron de la universidad y se fueron en dirección diferentes.
***
—¡Terminé!—dijo estirando su cuerpo mientras tronaba su cuello.
—Puedes irte jimin, hoy cierro yo.— Su compañera vino ya que se sentía mucho mejor y jimin agradeció internamente, hoy estaba igual de lleno.
— ¿Segura?
—Si, todavía no es tan tarde así que estoy bien, además viene mi novio a buscarme.
—Que suertes tienes. Bien, ¡Nos vemos mañana!— se acercó y le dejo un pequeño beso en la mejilla y salió del local.
Eran las once y habían pocas personas transitadas.
Su teléfono comenzó a sonar y contesto.
En la llamada
¿Diga?
¡Jimin!— fruncio el ceño al oír la vos agitada de su mejor amigo— ¡Ven a casa rápido! ¡Necesito ayuda!— antes de que pudiera contestar se colgó la llamada
Con el corazón en la boca corrió rápidamente a casa.
***
—¡Tae! ¡Taehyung! ¿Dónde estás?— tiró su mochila en la entrada y cerrola puerta de un portazo, reviso la sala y la cocina pero no estaba. Entonces escucho ruidos en la segunda planta.
Saco su gas pimienta y subió las escaleras sigilosamente.
Abrió un poco la puerta de Tae y al ver lo que estaba sucediendo soltó el gas pimienta.
—¡¿Pero que demonios está sucediendo aquí?!—Grito completamente enojado.
Tae estaba acostado mientras que hoseok intentaba ponerle un chaleco de cuero a la fuerza, ambos voltearon a ver el pequeño bulto con mejillas rojas del enojo y de los minutos que estuvo corriendo.
—Jimin...— hoseok hablo pero Tae lo empujó ganándose alado del más bajo.
— Este demente ¡Nos quiere llevar a una pelea!.
— ¡Oh vamos taehyung! ¡Será divertido!.
— ¿Solo por esa estupidez me llamaste Tae?— hablo entre dientes mirando a su mejor amigo quien le dedicó una sonrisa de disculpa.
— Jimin ¿Quieres ir?— el pelirosa al ver la cara de súplica de Tae para que diga que no, sonrió ampliamente.
— Con todo gusto iremos hoseok.— Tae resoplo y hoseok dió pequeños saltitos de alegría mientras aplaudía.— Te pasa por imbécil, iré a bañarme y nos iremos.
***
Jimin salió de la ducha con una toalla en su cintura, de su armario saco unos jeans claros un poco apretado, saco una remera blanca y una camisa rosada, sus calcetines blancos y sus Adidas blancas.
Terminó de ponerse todo y se dirigió al baño, dónde seco su cabello un poco, se puso un poco de sombra, un poco de máscara de pestañas, bálsamo labial de fresas, unos anillos y un fino collar con una rosa roja de dije.
Se miro por última vez quedando satisfecho y salió de allí, tomo su celular y bajo a la sala.
Ambos chicos estaban hablando de idioteces y se callaron cuando vieron a jimin.
—¿Nos vamos?— ambos asintieron y salieron de su hogar.
***
—Jimin, no te separes de nosotros, la mayoría de aquí son alfas, te verán como una presa fácil ya que eres un Omega con un exquisito olor, trata de esconder un poco tus feromonas están fuertes debido a que tienes tu celo.
—De acuerdo hoseok.
—No hablen con nadie, ni miren. Pensarán que quieren pelea, estos inútiles piensan con los puños.— ambos chicos asintieron ante las palabras de su mejor amigo.
Los tres bajaron del auto y las pocas personas que estaban fuera del lugar giraron sus cabezas para verlos.
Bueno solo a uno.
Caminaron ignorando las miradas y los piropos que le tiraban a hoseok y a jimin.
Entraron al lugar y el olor a tabaco junto a marihuana los golpeó como evaluación de matemáticas.
Jimin hizo una mueca ante el horrible olor y casi vomita.
Se abrieron paso entre la gente y llegaron a la segunda fila.
Jimin sentía que más de una mirada estaba puesta en el pero las ignoró olímpicamente.
—¡Buenas noches a todos! ¡¿Cómo se encuentran?!— todos gritaron y silbaron— ¡Me alegro! ¡Bueno, como todos sabrán hoy tenemos una espléndida pelea! ¡Por un lado tenemos a el destructor!— las personas comenzaron a gritar y a bulliciar. un chico de pelo castaño subió al ring mostrándose arrogante, era un alfa.— ¡Muy bien, y por el otro lado tenemos al inigualable, varias veces campeón, el conquistadoooooor! ¡El es jk!— los gritos fueron muchos más fuerte y hubo más silbidos,al ring subió un pelinegro que jimin supo enseguida quien era.
—Oh joder.
Voten
Y
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Algodón Y Fresas ||Omegaverse kookmin||
Fanfiction-¡A-Ayuda!- el pequeño cuerpo de un pelirosa corría desesperadamente por las calles oscuras de Seúl.- ¡Por favor que alguien...!- Sus palabras quedaron en el aire ya que su pequeño y frágil cuerpo fue tirado al suelo. -Nos hiciste correr mucho, pequ...