El osito de media noche

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El nudo de mi garganta.

Las lágrimas que alguna vez fueron sonrisas.

Los ojos marrones que me enamoraron.

Las palabras que me ilusionaron hasta el punto de enamorarme.

El culpable de las mariposas de mi estomago que terminaron con un enorme hueco en el corazón.

El culpable de mis desvelos.

La sonrisa que aun sigo queriendo para mis hijos.

El argentino que hizo extremeser mi mundo con solo dos palabras.

El asentó perfecto, con los labios besables de un rompe corazones que decía amarme.

La inspiración de mi corazón roto y mi alma dolida para escribir.

Lo que alguna vez pensé que era mi felicidad y hoy se reduce a menos que nada de mi vida.

Hecha de sentimientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora