°●°●°●°●°●°●°●°●°●°●¹⁹
『Un romance lleno de inseguridades, mentiras y falsas sonrisas ocasionará muchos defectos en la relación.』
「Aún así, yo te amaré ...te amo con todos tus defectos - Beso delicadamente al mayor.-」
Editado - 01-01-23 al ¿?
1°- te...
Sus manos temblorosas había logrado llamar a una de las tantas armaduras del héroe.
- ¡Dice que tardará una hora! - Grito histérico el castaño, ¿Qué podría hacer una simple armadura?.-
. . .
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
. . .
Aquel traje de metal terminaba por llenar la bañera de aceite, necesitaba un día de spa; se adentró en aquella bañera dejando relajar su cuerpo metálico.
. . .
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
.
. .
El mercenario seguía corriendo con el chico en brazos, este lanzó una telaraña a algún edificio así dándole la vuelta y perdiendo aquellos carros que los perseguían.
El mercenario aterrizó en un techo del lugar, dándose rápidamente cuenta de donde habían acabado.
- Uh, esto se pondrá interesante - Retiró su 'uniforma' así lo llamaba el.-
Hasta quedar en ropa de civil, el castaño solamente retiro su máscara.
- ¿A dónde vamos? - Preguntó el castaño, miraron a su alrededor.-
Eran calles totalmente desconocidas para el.
- Vamos a divertinos un rato - Contento abrió la puerta de aquel lugar, a la par que se escuchaba una sirena de policía.-
- Y a escondernos - Entró el castaño seguido del mayor.-
El ambiente lleno de música abundaba por todo el lugar, luces de colores recorriendo el lugar de un lado a otro.
- ¿Dónde estamos? - Preguntó el menor mirando a su alrededor.-
- Un bar para homosexuales - Respondió el mercenario.-
- ¡Soy menor de edad, traerme aquí es un delito! - Le grito en un susurró al mercenario.-
- Estás a meses de cumplir la mayoría - Le contesto el mercenario.-
- ¡Aún soy menor! - Se volvió a quejar con el mayor.-
Estaba empezando a sentir las miradas sobre su cuerpo, había sido mal día para escoger ropa que se ajustaba a su cuerpo.
Saco la sudadera de su mochila, amarrando lo en su cintura así tapando la vista de su retaguardia.
- Ven, aquí tenemos a alguien quien ayude - Se sentó en la barra del lugar, llamando al sujeto.-
- ¿Me podrías al menos decir tú nombre? - Se sentó junto al mercenario, dejando la mochila en el piso.-
- Wade, Wade Winston Wilson - Se presentó el mercenario.-
- Y tú, eres Peter 'Parker' - Volvió a hablar el mercenario, recibiendo su tarro de cerveza.-
- ¿Cómo lo sabes? - Recibió el bote de refresco tomándose el contenido indeciso.-
- Tengo contactos - Levantó su móvil enseñando una foto de Peter junto a su familia.-
- Estás loco - La cabeza del castaño empezaba a dar vueltas, su vista se volvía borrosa.-
- Me lo dicen diario - Tomó lo último que quedaba de aquel líquido en el tarro.-
El 'refresco' que había tomado Peter estaba mezclado con whisky dando de resultado un fuerte mareo.
- ¿Te habían dicho que eres sexy? - El efecto del alcohol le había pegado rápido al menor.-
- Bueno, pocas mujeres - Volvió a pedir otro tarro de cerveza.-
Observaba como el héroe arácnido se levantaba a caminar tembloroso al centro, donde varios hombres y pocas mujeres bailaban.
El ambiente se habría alocado por parte de Peter, la mayoría de hombres se levantaron al verlo mover sus caderas ...olvidándose por un segundón su 'heterosexualidad'.
- Ven acá - Cargo entre sus brazos al más bajo, sintiendo sus delgadas piernas aferrarse a su cintura.-
Se volvió a sentar en la barra, tenía al castaño en su regazo mientras esté tomaba su cerveza.
- Dios, no sé si estas erecto o no - Pauso el castaño moviendo sutilmente sus caderas- ...pero es enorme.
Dio unos pequeños brincos en el regazo del mercenario sintiendo como este se ponía poco a poco más erecto.
- No te detengas - La voz ronca del mercenario exitaba al castaño, agarro las manos ajenas adentrandolas a su propia camisa.-
Las depósito en sus pezones mientras seguía dando pequeños brincos en el regazo del mayor.
El ambiente exitante entre ambos crecía, olvidándose todo a su alrededor ...la puerta del bar fue abierta por una peculiar pareja, buscaron con la mirada a su retoño.
Oh oh, creo que no era el mejor momento.
El castaño saltado en el regazo del mercenario mientras este alzaba un lado de la camisa del menor, para poder ocuparse de un pezón con su boca mientras una mano se ocupaba del libre; la otra descansaba en el trasero del chico.
