Capitulo 2

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- No vas a ir a lo de tu Padre este verano. No sola.
- No te parece que es tiempo de que lo vea, hace 2 años no lo veo.
- No te parece que es tiempo de que él venga para acá.
- No seas injusta. Sabes perfectamente que por su trabajo no puede venir. Trabaja todo el año y aun así no le alcanza la plata.

Mi madre se quedo callada, hace una hora que venimos discutiendo de esto. Yo quiero y voy a ir. Y nadie puede prohibírmelo, voy a llamarlo y decirle si me pague un pasaje.
Se que a él se le hace difícil venir porque no le pagan mucho dinero y no es como mi mama, que vive de hombres viejos con dinero. Ojalá me pudiera ir a vivir con él, todo sería mas fácil. Mi madre con su hija perfecta, aparentando ser gente de dinero que no son y yo con mi Padre siendo reales, sin mascaras.
Fui directamente a mi habitación porque di por terminada la charla y yo ya había tomado una decisión. Llamé a mi padre y él no pudo decirme que no. Así que enseguida comencé a hacer mis maletas.
Algo que había olvidado es que soy muy impulsiva y muy directa, no ando con vueltas de nada.
- ¿Te vas a ir Celeste? - Dijo Martin
- ¿Nos vas a dejar porque discutiste con Mama? Pregunto Jorge
- ¿Quién nos va a llevar al parque? - Contestaron ambos
A veces parece que tienen telepatía.
- Que me importa eso, fíjense si su madre arruinaría sus uñas falsas y un par de zapatos para llevarlos. Yo ya no voy a estar aquí.
Ambos se fueron. Seguí armando mi bolso y terminé; la verdad es que mucha ropa no puse, solo llevo una mochila con un par de remeras largas, unos joggins y dos pares de zapatillas. Tengo que apurarme porque el vuelo sale en dos horas. Cargue mi celular, el ipod...
- ¿ DONDE ESTÁ EL iPod? - Grité
Pronto recorde que lo tenian los diblillos así que me dirigí a su habitación. Desde la puerta los escuché llorar.
- Hey, hermanitos, ¿Qué pasá?
- Nos has gritado, has sido mala con nosotros...
- oh no, lo lamento pequeños, estaba enojada con mama y me la agarre con ustedes, vengan... un abrazo de oso - dije mientras los abrazaba.
Seque sus lagrimas y los miré
- Los amo peques
- Nosotros también
- bien, ¿Me dan mi Ipod?
-¿Puedo preguntar algo? dijo jorge
-Si, claro...
- ¿Podemos ir con vos?
Me partio el corazón verlos con los ojitos de perro mojado diciendome eso.
-Ojalá pudiera hermanitos, pero mama no me deja ni a mí...
- ¿Nos podemos escapar contigo?
- Lo lamento... tienen que convencer a Mama para que los deje. Ahora, un beso para cada uno y me voy.
Les di un beso en la mejilla, junte mis cosas y me fui, tenia ahorrado algo de plata así que lleve unos $10000 , pagué el taxy que me dejo en el aeropuerto.
Entre al enorme aeropuerto y me senté a esperar el horario de que saliera mi avión. Como no tenia valija, todos los tramites fueron rápidos.
Estaba muy ansiosa de volver a ver a mi padre y de estar lejos de mi madre.
Me quede mirando como salían los aviones. Ya estaba anocheciendo y se veía que el cielo se estaba tornándose azul oscuro.
Como me aburría, me puse a leer un poco. Pero no quería gastar toda mi batería así que espere sentada observando a la gente a mi alrededor.
A dos asientos mios, había una anciana que se ve que quería charlar y estaba entreteniendo a una Madre que tenía muchos niños, como 3 y estaban todos correteando por ahí. En frente mio había un hombre con corbata y traje, parecía ser serio y tenia el ceño fruncido, como enojado.
A lo lejos se veía como la gente hacía fila para entrar a otro avión, niños desesperados por subir, padres nerviosos por el viaje, gente con la nariz repingada (o sea de mucha plata) mirando con desprecio a los niños que corrían y jugaban.
Hay muchas personas en el aeropuerto, es divertido prestarle atención a cada una.

El vuelo 187 esta listo para salir directo a Misiones. - Llamaron por el altavoz y yo me preparé aunque sabia que faltaba mucho porque primero subían los de primera clase, luego viejitos, después niños y por último el resto.
Una fila larga se creo enseguida que llamaron. Yo espere un rato sentada, total nadie podia robarme mi lugar porque los boletos vienen con número de fila ejemplo 37 y numero de asiento ejemplo D y justamente ese era mi asiento.
Ni bien entro al avión, busco mi lugar, y es uno de los últimos, lo único que deseo es que nadie se siente a mi lado. Llegando a mi asiento veo que hay dos personas así que les pregunto
- Buenas tardes, va... buenas noches, ¿Qué numero de asiento tienen?
- Hola, 37 C y D
- Ah, mi asiento es el 37 D aquí debe haber un problema.
Llamé a la azafata y le mostré mi boleto.
- Si, su asiento es el 37 D, podrían mostrarme ustedes su asiento?
El hombre y la mujer sacaron sus boletos y se los mostraron.
- Señor su asiento es el 37 B
- oh, lo siento.
- ¿si nadie se sienta en el 37 A, podría pasarme a aquel asiento? - preguntó la mujer del hombre
- Saben que, yo voy al asiento 37 B y no se preocupen - contesté
No tenia ganas de discutir, estaba sola y el asiento estaba vacío así que, no me importaba, solo quería sentarme y llegar rápido a Misiones. 
Le mandé un Whatsapp a mi papa, "ya estoy por salir, ¿vendrás por mi al aeropuerto?"
Rápidamente me contestó que si, y una sonrisa se apoderó de mi, no veo la hora de estar con él. No se por qué nunca se me ocurrió venir a vivir con él.

Abrochen sus cinturones y disfruten del vuelo. Se escucho por el parlante
Este verano va a ser de lo mejor, espero volar muy alto.

Mi vida es una típica historia de WattpadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora