Microrelatos

¿Se puede sentir ternura y miedo a la vez?

A ver esta experiencia me ha costado hasta titularla y mucho más compartirla. No obstante, siento la necesidad de hacerlo público ahora... Después de tantos años. Se lo habré contado solo a mis más allegados. Empiezo pues: Yo nunca conocí a mi abuelo por parte de padre en persona, es más solo sabía que se llamaba Juan como mi padre. Una tarde yo estaba jugando con mis muñecas en mi habitación y salí para ir al baño. Fue entonces cuando vi en la salita (habitación justo al lado de mi dormitorio) a un hombre, apoyado en la mesa mientras contemplaba una foto mía con mis padres. Se parecía un poco a mi padre, con los ojos azules y el pelo castaño oscuro un poco revuelto. Vestía un traje de chaqueta creo que azul marino u oscuro. Él se dio cuenta que lo estaba mirando, me sonrió y me hizo un gesto con la mano para que fuera. A mi me trasmitía calidez, pero aún así tenía miedo (terror a lo desconocido, no sabía quien era). Así que fui corriendo hacia la cocina donde estaba mi madre y le dije que viniera que le quería enseñar algo. Fuimos juntas a la salita yo un poco asustada (aunque ya no tanto porque estaba con mi mamá). Le señalé al hombre que estaba de pie junto a la mesa, pero mi madre dijo: - ¿Qué? ¿Qué pasa? Evidentemente no veía al hombre, así que me fijé en una foto que había en la estantería de ese mismo hombre y se la señalé. Mi madre me dijo: - Sí, ese es el abuelo. Y así fue como descubrí quien era ese extraño que se coló en mi casa. Después de eso no lo volví a ver, quizás sólo quería conocerme. Esto quedó grabado en mí. Quizás mi imaginación me jugó una mala pasada o eran las ganas que tenía de conocer a mi abuelo. Creo que nunca lo descubriré.