–¿Estás lista? –le preguntó Mike a Eleven, sentado al lado de ella mientras ésta se encontraba preparándose para entrar a la mente del chico.
–Sí, lo estoy, ahora hagan silencio –les reprocharía la castaña para luego colocarse una venda tapándole los ojos y comenzar con su tarea.
Will aún se encontraba en la otra otra habitación, leyendo despreocupadamente, cuando oyó que estaban por comenzar y empezó a preocuparse. De alguna manera que el desconocía, logró sentir a la chica entrar a su mente, cosa que nunca antes había experimentado. Así comenzó a "ver" lo que ocurría en su mente, como si fuese un sueño, un recuerdo, realmente no sabía describirlo, era muy extraño.
Ay no, ya está adentro –pensó, para luego entrar en pánico, se había delatado, El ya sabía que él la notaba, pero ella seguía caminando normalmente... Qué estaba ocurriendo? Parecía que no tuviese control de su mente. A lo lejos, el chico logró distinguir algo que parecían dos figuras peleándose por dominar a la otra, no podía describir exactamente que eran pero también parecía que la chica no lo notaba, y en cambio la escuchó hablar.
–Ay no, pobre Will –la escuchó decir, con tono afligido. Su estado era de confusión, ¿cómo ella no notaba que nada le estaba ocurriendo?
De repente, la vio desaparecer, y todo volvió a la normalidad, el chico volvía a estar frente a su libro.
Listo, ahora prepárate, van por tí –dijo una voz en su mente la cual pudo deducir rápidamente de quién era.
Gracias, pero, cómo puedo llamarte? Guardián suena estúpido –le contestaría.
Puedes decirme cómo quieras, para algunos soy Dios, para otros el diablo, la mayoría no sabe ni que existo... Personalmente prefiero el nombre Conan, si me dices así no me molestaría –volvería a decir en la mente del chico.
Está bien, Conan –volvería a contestar Will, para luego ser sus pensamientos interrumpidos por una conversación que ocurría del otro lado de la puerta.
–El, EL! ¿Qué viste, estás bien? –gritó Mike, al verla quitarse la venda, agitada.
–Eso, ¿El que pasó? ¿Está todo bien con Will? –preguntaría Max sentándose junto a ella.
–L-lo tiene dominado, es más fuerte que nunca... –alcanzaría a murmurar para luego comenzar a llorar, siendo seguida por la madre del chico anteriormente nombrado, ninguna de las dos comprendía, ¿por qué siempre les pasaba todo a ellos? En realidad nadie del grupo lo hacía, era por ésto que los Byers iban a mudarse, hasta que la señora Byers cambió de opinión...
Luego de esto nos iremos, no me importa si Hop dice que aquí estamos seguros o lo que sea, este maldito pueblo no es seguro para mis hijos –pensó Joyce intentando ser positiva acerca de la gran guerra que se aproximaba, de lo cual ella no tenía ni idea de lo difícil que sería. ¿Quien garantizaba que todo saldría bien?
Hopper fue a abrazar a su esposa, recibiendo una mirada de reproche de ésta, siendo incomprendida por el hombre. Vio que todos comenzaban a alterarse, por lo que decidió gritar:
–¡TODOS TRANQUILOS! Veremos cómo resolverlo, ahora váyanse a sus casas, ya es tarde –diría recibiendo protestas de parte de todo el mundo, aunque poco a poco todos fueron dejando el lugar, quedando así solo la pareja, sus respectivos hijos y Mike.
–Que te vayas dije –le espetó el hombre al verlo allí.
–De que hablas? Vete tú, está es mi casa –contestó Mike en tono de reproche, recibiendo una mirada de desagrado y podría decirse que hasta de odio de Hopper.
–Joyce, amor, deberíamos irnos, tenemos que descansar –dijo el hombre a su esposa, yendo está a buscar a su hijo menor, el cuál se negaba a irse.
–Déjalo, puede quedarse a dormir si quiere, bueno si lo dejan –propuso el dueño de la casa "salvando" así a su amigo, recibiendo una mirada agradecida de éste. La mujer se negaba a irse sin él, pero finalmente fue convencida por sus esposo e hijo mayor, y así la familia Hopper-Byers dejó la casa de los Wheeler, dejando a Mike y Will solos, ya que los padres habían salido y la hermana del primero se había ido con la familia de su novio, Jonathan Byers.
–Al fin se fueron –suspiraría aliviado el menor al ver a su familia dejar la casa.
Mientras tanto, su amigo, con la idea de que se encontraba poseído, lo observaba preocupado, cosa que confundía a Will hasta que cayó en la cuenta de lo que ocurría.
–Que pasa? –preguntó Will con desinterés.
–Eh? Nada, nada –contestó Mike saliendo de sus pensamientos, sumergiéndose así ambos en un silencio algo incómodo.
El rato pasaba, y ambos se encontraban pensando, querían romper el silencio pero ninguno se animaba a hacerlo hasta que el mayor lo logró.
–Y... Estás bien? –preguntó sentándose a su amigo y observándolo.
–Qué estúpida pregunta Mike, es obvio que no se encuentra bien –se dijo mentalmente a sí mismo el chico.
–Eh, sí, por qué no lo estaría? –dijo Will sin pensar demasiado en lo dicho por el otro, y viéndolo a los ojos.
–Porque... nada –contestó el pelinegro perdiéndose en la mirada del otro, acercando sus rostros lentamente el uno al otro.
Cada vez estaban más cerca, ambos sentían la necesidad de dejarse llevar, querían conocer al otro, sentirlo...
Pero de repente la puerta se abrió.
–Chicos? Está todo bien? –dijo la señora Wheeler entrando a la habitación de repente.
La pareja se separó apresuradamente al escucharla, nerviosa.
–Mamá! Te dije que tocaras antes de abrir! Pero sí, estamos bien –dijo el hijo con tono molesto.
–Está bien, estaré en la cocina por si me necesitan –contestó la mujer yéndose.
–Eso estuvo cerca, demasiado cerca –pensó Will.
–Si, casi se besan –contestó la voz en su mente.
–Hey! Metido –exclamó sin darse cuenta de que lo decía en voz alta.
–Will, a quién le hablas? –dijo Mike viéndolo con preocupación.
–A-a nadie –contestó Will nervioso al darse cuenta de su error. –Vamos a dormir? –preguntóa yendo a cambiarse y volviendo ya listo para luego acostarse.
–Si... Hasta mañana, que descanses bien –dijo Mike acostándose junto a él.
Ambos se quedaron en silencio, hasta que el sueño les ganó, pero antes de esto se oyó un susurro casi inaudible:
Te quiero
——
Actualicé jeje, no me maten por la demora, les amo
Pueden dejarme cualquier duda o sugerencia que tengan acá (o donde quieran jsjs)
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ɪ ᴡɪꜱʜ ɪ ᴡᴇʀᴇ ᴇʟᴇᴠᴇɴ... - Byler
Fanfiction- Te amo, Mike... - ¡WILL! Yo también te amo, aunque ya sea tarde... ............................................... Creían haberlo derrotado, pero no fue así... Inspirado en la canción Heather, del dios Conan Gray (no me importa que ya existan cuat...