V

294 31 20
                                    

"La terrorista no debe ser castigada"

Capricornio dejó a Géminis toda la tarde al cuidado de la señora Wang, mientras volvía al trabajo, necesitaba saber hasta dónde había llegado Leo eliminando las pistas hacia su omega.

-Adiós JinJin, pórtate bien-
Una vez más Capricornio acarició a Géminis, era la tercera vez que se despedía.

Toda esa tarde Géminis soportó la vergüenza de ser tratada como una cría malcriada, gozando a veces por las deliciosas comidas que le eran otorgadas por la más insignificante acción y entendió el poder ilimitado del que gozaban los bebés.

Como no tenía ninguna responsabilidad más que respirar, no se le agotaba la energía, y cuando llegó la hora de su siesta, solo se concentró en rodar por las sábanas rasguñándolas inintencionadamente, cabe mencionar que la destrucción estaba siendo realizada en los aposentos de Capricornio.

-¡Bebé llegué!-
Gritó Leo asustando a la señora Wang.

-Silencio, si vuelves a gritar te vas-
Dictaminó Capricornio cerrando la puerta.

-Coronel, no esperaba que viniera acompañado-
Sonrió amablemente la mujer a Leo que respondió igual.

-Solo me quedaré una hora, tía Wang podrías llevar té a mi estudio?- Capricornio buscaba alguna señal del cachorro, pero no veía a la masa naranja por ningún lado.

-¿Puedo pedir un sándwich?-
Habló Leo, siendo recriminado por el otro.

-No seas mezquino e invítame a comer- se quejó el signo fuego haciendo que Capricornio rodara los ojos.

-Comimos en la base, deberías estar lleno-
El de ojos esmeralda estaba impaciente.

-Esa asquerosidad me envenenaría, ¿tía puedo pedirle ese favor?-
Suplicó Leo haciendo sonrojar a la señora Wang que asintió avergonzada.

-No coquetees con mi ama de llaves- Capricornio murmuró mientras se alejaba por las escaleras.

-No estaba coqueteando, se llama sugestión-
Lo siguió Leo negando con la cabeza.

Mientras Leo esperaba en el estudio, Capricornio fue a cambiarse, esa fue su excusa para buscar a Géminis, al entrar a su habitación vio a la montaña naranja destrozar alegremente las finas sábanas que cubrían su lecho.

Como si no le importara, siguió avanzando, tomó a la autora del infame hecho y la depositó sin más en el suelo, la villana al notar que la alejaban de su obrar abrió los ojos tambaleándose antes de doblarse hacia el piso, confundida miró a su alrededor y se dio cuenta de que la despertaron del sueño en donde luchaba contra una goma de mascar gigante.

Miró al caballero situado frente suyo e inexplicablemente retrocedió al percibir un aura de odio y venganza, lógicamente él notó eso y las dagas de jade perforaron los iris de la roca naranja.

"Puedo explicarlo" retrocedió Géminis queriendo ser absorbida por la pared.

-Yùjìn te dije que te portaras bien-
Habló el hombre tomando a la lánguida masa naranja entre brazos.

-Mira el desastre que hiciste-
Recriminó, la ira apenas se escondía entre ese tono sereno dirigido hacia Géminis.

Pero al ver a la omega cerrar los ojos ante su actitud, el hombre de hielo negó y solo frotó su rostro contra el de su cachorro.

"Hey hey, qué haces?, alto ahí" Géminis se retorció entre los brazos de aquel desvergonzado que estaba a segundos de aplastarla y en esos momentos simplemente decidió ignorar el espacio personal.

Confused |Capríminis|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora