Confused |Capríminis|

I

Las investigaciones resultaron inconclusas, no había ninguna pista de lo que le sucedió realmente a Géminis. La policía le entregó nuevos documentos de identidad, en los que se veía fatal, prometieron que en unos meses lo cambiarían.

Con la promesa de seguir buscando respuestas, los investigadores archivaron el caso hasta nuevas hipótesis.

-Géminis, estás segura que recuerdas como llegar a tu casa?-
Preguntó la enfermera, Géminis asintió.

-Es muy raro que tu tía no tenga teléfonos-
Suspiró la amable mujer antes de remitir el alta de su paciente.

-No se preocupe, estaré bien, anoté la dirección en esta hoja- Géminis mostró el trozo de papel a lo que la enfermera se calmó un poco más, además a las diez de la mañana, ¿qué peligro podría correr habiendo tantas personas en la calle?

-Ten mucho cuidado-
Sugirió y entregó a la chica una receta con los medicamentos que debía comprar.

-Muchas gracias-
Sonrío alegremente el signo aire y salió de la habitación.

...Seis de la tarde...

Géminis descubre que tomó el autobús equivocado, llega al distrito M de la ciudad, ella se dirige al distrito C, odia no haberse fijado en la estación.

El viaje a ciudad C es de dos horas como mínimo, el autobús está casi vacío y luego de pasar su identificación el conductor bufa al notar que como es menor, el estado cubre sus viajes en autobús.

Se sienta al final y mira desinteresadamente a la gente que se encuentra sumida en sus propios problemas, en unos segundos, logra acurrucarse debido al frío repentino y duerme incómodamente.

-Niña, niña!-
Siente que le tocan el hombro, el conductor la mira un poco molesto. Nota que es la última pasajera de allí, se disculpa y baja apresuradamente.

La ciudad es realmente hermosa, se detiene a leer el cartel informativo, su población dice ser la segunda mayor de todo Wolf Empire, después de Ciudad Y en donde reside la familia imperial y gente importante.

Apenas comienza a oscurecer y se encienden todas las luces, Géminis parece ser de otro planeta, es la única que se detiene a observar todo con curiosidad, es como una polilla, fascinada por lo brillante que resulta ser el lugar.

Intenta buscar señalizaciones, pero no le resultan familiares, finalmente se detiene a preguntar y le indican el camino, le tomará media hora recorrer un kilómetro, así que se propone caminar rápidamente.

La noche se lanza sobre la ciudad brillante, Géminis se sorprende del tiempo que ha estado vagando, sus pies comienzan a doler, pero no se detiene, llega a un lugar donde su miedo incrementa, pero no puede desviar ese punto, es hacia allí donde se ubica la casa de su tía, siente que la observan, sabe que no son gente amable o buena, camina con la cabeza gacha, lo último que quiere es llamar la atención.

Finalmente llega, para su sorpresa hay una tienda de cupcakes en el lugar donde debería ser una casa, el comercio no combina con el ambiente tóxico de ese lugar, confundida ingresa a la tienda y ve que tras la vitrina hay un hombre extremadamente alto y musculoso, de unos cuarenta años y sentados en un sofá a lo lejos, más hombres tenebrosos.

Géminis se arma de valor para hablar y que su voz suene lo más neutral posible.

-Buenas noches señor, no vive aquí Dominique Le Blanc?-
Pregunta en un hilo de voz, se le eriza la piel al notar que los demás hombres se le acercan curiosos.

-No niña, te has equivocado-
Responde este indiferente.

-Entiendo, muchas gracias-
No importa si el hombre mentía, Géminis solo quería salir de ese lugar, un minuto más y su corazón se paraliza del miedo.