Final Alterno +18

23 5 0
                                    


— Fue horrible...- lloriqueo al teléfono. — Pensé que íbamos a morir, que no volvería a ver a mi pequeño Sang.

— Oh, cariño, nosotros también nos espantamos cuando vimos las noticias en la televisión. - appá me dice. — Pero afortunadamente están bien. - suspiro hondo.

— Sí. Aunque nuestras maletas se perdieron. No tengo ropa. - escucho la risita de appá a través del teléfono.

— Bueno. No es como si fueras a necesitarla. - abro los ojoss muy grande.

— ¡Appá! - appá empieza a reírse a carcajadas. Frunzo el ceño. — Te está haciendo daño juntarte tanto con el joven Donghae.

— Bueno, bueno, ya no interrumpo tu luna de miel. Me alegra que los dos estén bien, y no te preocupes por Sang, nosotros lo cuidamos.

— Gracias appá, te extraño. - le digo antes de cortar la llamada.

Me giro para ver a Hyung Sik sentado en la cama, apenas ve que lo veo, se pone de pie, luciendo su hoodie y pantalones deportivos comprados en la tienda de souvenirs del hotel en donde tuvimos que quedarnos cuando nos rescataron.

No puedo evitar sonreír. En la tienda solo tenían una talla, misma que a mi me ha quedado grande, y a él muy pequeña.

— De nuevo estás riéndote de mí. - Hyung Sik entrecierra los ojos.

— No... solo...- empiezo a reírme más. — Lo siento, lo siento...

— ¿Sabes? — Hyung Sik se acerca poco a poco. — Tengo la solución perfecta.

— Ah sí, ¿cuál? - de pronto empieza a quitarse el hoodie.

— Simplemente creo que...- veo caer el hoodie al piso, se ha quedado con el pecho desnudo. — no necesitamos esto. - abro los ojos muy grande cuando empieza a quitarse los pantalones..

— Hyung Sik... - sonríe.

Muerdo mi labio inferior al ver que se ha quedado solo en calzoncillos, y lentamente comienza a acercarse a mí.

— Y tu tampoco los necesitas...- me dice mientras sujeta mi hoodie y empieza a sacarlo por encima de mi cabeza.

— Sí...- murmuro mientras mis labios buscan los suyos...- creo que no los necesito.

Paso mis brazos alrededor de su cuello, nos besamos con la misma pasión con la que lo estábamos haciendo en el avión antes de que todo pasara. Hasta ahora no habíamos podido continuar con lo que estábamos haciendo, entre el susto y todo el caos sucedido después, apenas hemos tenido tiempo de respirar.

Pero ahora... sus manos lentamente se introducen en mis pantalones. Gimo sobre sus labios al sentir sus dedos acariciando la punta de mi pene. Pego mis caderas a las suyas, buscando el contacto. Mi respiración comienza a agitarse.

Interrumpo el beso con la necesidad de gemir más fuerte cuando su mano comienza a moverse sobre mi pene. Dejo caer mi cabeza hacia atrás.

— Dios... sí...- gimo.

— Eso mi amor... te ves hermoso. - Hyung Sik murmura en mi oído y eso me hace estremeser.

— Más...

Hyung Sik poco a poco nos hace girar y lentamente me empuja a la cama. Mi respiración está agitada. Lo observo quitarse los calzoncillos, y veo su pene erecto. Muerdo mi labio inferior y humedezco mis labios imaginando poder tenerlo en mi boca.

Se inclina y toma el elástico de mis pantalones, junto con el de mi ropa interior y tira de ellos para quitarmelos. Me ha dejado completamente desnudo sobre la cama. Con los codos, me acomodo para poder darle espacio para que suba a la cama conmigo.

Marry... MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora