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Desde aquel día ha pasado dos semanas, en ese tiempo, Mew ha hecho todo para que su madre no se decaiga más. Le hace el desayuno, si es posible las tres comidas del día, después de la universidad le va a contar a su madre como le fue u otras cosas.

Buenas noticias, para que su madre se distraiga un poco.

— Buenos días, madre. —saludó alegre el chico, con la bandeja de comida en sus manos— Es hora de despertar. Te traje el desayuno.

La suave voz de su hijo llamándola, hizo que se levantara de apoco. Y no había mejor forma de despertar, que ver Mew regalándole una linda sonrisa.

Después de brindarle una sonrisa suave, se acomodo en la gran calma.

— Buen días. Gracias por traerme el desayuno, pero no es necesario —Mientras hablaba, Mew dejaba la bandeja en la mesita que tenía su mamá a lado de la cama.

— ¿Por qué no, madre?

— Porque tienes tantas cosas que hacer, yo sin ningún problema puedo ir por mi desayuno.

— No, está mejor que te lo traiga aquí.

— Gracias. —Suelta con su voz suave, sin quitarle la mirada a su lindo hijo. Tenía tantas cosas que agradecerle.

— No tienes que agradecer nada, madre.

— Hay que desayunar. —Concentra su mirada en el plato de comida, y agradece que haya cosas que aún puede comer.

Mali quería evitar a toda costa el tema de Mongkut, pues no quería que Mew le pregunté porque anda tan apagada, sin energías.

El mencionado se estira hacia la mesita de noche, específicamente sobre la bandeja de comida. Agarrando un trozo de fruta con el cubierto, para darle a la mayor.

Así estuvieron por un largo tiempo, el chico dándole de comer a su mamá, hablando de varias cosas, hasta que Mew notó que ya era hora de ir a la universidad. Se despidió de su mamá con un beso en la mejilla.

Ya estando en lo antes mencionado, busca a su amigo con la mirada, pero ve que éste estaba hablando con alguien familiar.

Después de sacar un leve suspiro, se acercó a ellos, llamando la atención de los presentes de inmediato.

—Hola, Mew —Saludó Tyler, feliz de volver de verlo.

— ¿Qué tal? —No le agradaba ser alguien irrespetuoso, así que siempre era lindo con las personas, les cayera bien o no.

— ¿Por qué no llegaste ayer? —Pregunta Bright, pues el castaño decidió faltar el día anterior para estar con su progenitora.

— Falté por mi madre.

— ¿Sucede algo con ella?

— No, todo en orden. —Le regala una sonrisa algo forzada, intentando de alguna forma evitar el tema.

— Está bien, pero sabes que siempre tiene mi apoyo, y el de mi familia por cualquier cosa. —Bright le da unas leves palmaditas en su hombro. Algo no andaba bien y lo sabía, pero también tenía en cuenta que Mew le dirá en su momento— Oh, si. Tyler preguntó por ti, al parecer estaba preocupado.

Su mirada se va hacia el antes mencionado, quien se sonrojo por lo dicho.

Aquel sonrojo no causó nada en Mew.

¿Cómo decirle a su amigo que él no siente nada por Tyler? ¿Cómo decirle que aquella sonrisa tímida que siempre tiene el menor cuando esta con él, no tiene ningún afecto en su cuerpo? ¿Cómo decirle que no cree la posibilidad que se fijé en ese tímido chico?

Tú eres la flor más linda | MewGulf. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora