No Soy Lo Que Creen <<El Mundo De Riley>>

<<Chapter XXII>>

Chapter XXII

"El Perdón"

"Quiero Que Tomes Mi Mano Y Nos Vayamos Lejos, A Pesar Del Tiempo Tu Fuiste Quien Siempre Estuvo A Mi Lado"

    -Dime la verdad. -Sonreí viendo fijamente a Alex.

    -¿De qué verdad hablamos? No quiero decir algo que no deba. -Guiñó el ojo mientras se cruzaba de brazos.

    -Hablo de Josh, tú le dijiste que estábamos aquí, ¿cierto?

    -Para nada -respondió desviando la mirada, estaba mintiendo-, él te conoce demasiado bien.

    -No tengo duda de eso pero también sé que fue demasiada coincidencia que pudiera encontrarme en esta montaña gigante, así que dí la verdad.
  
    -No sé como consiguió mi número, pero cuand me hablo dijo que venía en dirección hacia este lugar, ya sabes, la reserva, así que está bien, le dije que te encontraría aquí y te mandé a dar un pequeño paseo por la montaña, no es muy difícil hacer que salgas.

    -No comprendo como es que aún te hablo, debería alejarme de tí. -Me crucé de brazos tratando de aparentar estar molesta-. Nunca respestas mis decisiones.

    -Entiende que sin mí serías un dessastre. -Rió sacudiéndome el cabello de manera cariñosa-. Más de lo que ya eres.

    -¿Gracias? Creo que en realidad eso no es lo que debería decir.

    -Es justo lo que debes decir, ahora ve a darte una vuelta por la montaña antes de que tengamos que irnos.

    -Como ordenes. -Reí rodando los ojos mientras salía de la casa.

    Aquel frío abrazador me tomó desprevenida. Parecía hacer mucho más frío que los otros días. Quería regresar a la casa pero pensé en lo que me había dicho Alex, era cierto que ya eran mis últimos minutos aquí así que decidí empezar a caminar. Me abrazaba mientras avanzaba. Incluso parecía haber más nieve que de costumbre ya que se me dificultaba más caminar.

    No sabía cuantas veces había subido ya esta montaña, sin embargo, me seguía preciendo hermosa desde la cima. De un lado llegaba a ver las cabañas que se rentaban, un pequeño pueblo en donde podíamos comprar cosas y poco más. Del otro lado, solo era bosque, los árboles estaban cubiertos por toda la nieve y se veía mucho más hermoso.

    Sabía que no tenía que entrar a la zona de bosque ya que nadie iba ahí, era una reserva pero esa zona no era particularmente turística. Pensé que quizá no volvería aquí hasta dentro de un tiempo así que quise ir a dar un prqueño vistazo, rápido y volvería. No era mi mejor idea pero confiaba en que nada malo me sucedería.

    Comencé a bajar con lentitud y cuidado de no tropezar. No sabía si lo espesa que estaba la nieve me ayudaba o al contrario, hacía que fuera más fácil el hecho de poder resbalarme. Cada vez sentía que la montaña estaba mucho más inclinada así que decidí volver. Dí media vuelta cuando mi celular comenzó a sonar, conteste mientras dí media vuelta para  regresar.