Reflejo

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Seguíamos abrazados en silencio, hasta que una pregunta lo rompió.
-¿Qué tal el viaje? -preguntaba Eduardo en la misma postura.
-Bueno, Paula hace desde siempre lo mejor para mi, y le agradezco lo que hizo ,pero yo sigo mal y tengo que aceptar lo sucedido y un viaje no me va ayudar. Además, nos encontramos a Nuria y a Luigi...
-Espera,¿Viste a Luigi? JAJAJAJA- se reía escandalosamente.
-Si tio, y ni puñetera gracia... Un plan que tenia Nuria para volver a hablar con el , conseguir un polvo tres cenas románticas y un beso.
-Que poética- respondía mi amigo.
Le miré con una ceja levantada y la sonrisa torcida.
-Y ¿Qué tal Nuria? - seguía preguntando
-Bien, está haciendo proyectos o cosas asi, decidí no enfadarme con ella porque no quiero estar mal con ella.
-Ya , entiendo... Me alegro que esté bien en verdad.
-Supongo- terminaba la conversación acurrucándome más.
Me di cuenta que era dia laboral y le pregunté a Edu si iba a trabajar esta semana.
- Trabajo de tarde esta semana ,menos el Sábado. -comentaba despegando su cabeza de la mía indicando que quería levantarse. Me preguntó si quería algo de comer o de beber,le respondí girando la cabeza de un lado a otro interpretando un "no".
El se preparó un descafeinado, llevaba puesto un jean negro y una camisa violeta y las zapatillas de casa. Eso si, no faltaban sus tres anillos ,su pulsera de cuero y el colgante que teniamos en común: el yin y yang,
el tenia el yin.
Muy e-boy  vestía mi chico.
Mientras el café se hacía,yo observaba desde la puerta de la cocina, el me miraba y mientras lo hacía sacaba su caja de tabaco y un pitillo. Cogió el mechero que tenía encima de la encimera y lo encendió , soltó una calada y me invitó, yo no estaba muy segura,pero acepté...llevaba sin fumar unos 5 meses,pero lo necesitaba.
Ya había pasado una hora y media ,estaba por irme , ya le había contado todo,desde que llegué a casa tras el funeral hasta lo ocurrido esta mañana,pero antes  tenia que ir al baño .
-Amore, ¿Dónde está el baño?
Señaló la planta de arriba con el pitillo en la boca.
-Cierto, vuelvo ahora- decía  subiendo las escaleras. Necesitaba lavarme la cara.
Llegué al baño, abrí el grifo y procedí a mojar las manos y la cara.
De repente,una niebla empezó a entrar en el baño, era como vapor. Abrí la ventana que habia en el cuarto, no tenía ni idea de donde salía,y volvieron...esas voces llamándome con ese canto de sirena de fondo.
Me miré en el espejo fijamente, salí corriendo del baño y cerré la puerta, no me moví del sitio, solo estaba a un metro de  la puerta. Las voces seguían mas fuerte  cada vez que me alejaba de la puerta, no tuve opción ,si quería parar las voces, tenía que entrar. Abrí la puerta , el baño estaba lleno de vapor , apenas se veia, la puerta se cerró de un golpe ,no podía abrirla.
Una voz masculina susurraba mi nombre ,yo preguntaba con las lágrimas en los ojos , quien era ,que quería...
El vapor fue desapareciendo por la zona del espejo, y se fue haciendo visible una marca.
Observé como el espejo estaba dibujando , si, dibujando. Pensaba al principios que era el vapor y el agua cayendo ,pero no.
En realidad el espejo estaba escribiendo algo...unas letras... Una frase, miré mas fijamente y cuando se vio visible leí : "Tú lo sabes".
Mis ojos no pudieron abrirse más, corrí hacia la puerta ,el vapor  apuntaba hacia mi, daba golpes a la puerta para que abriera y funcionó. Escapé para las escaleras, Eduardo se acercó no le dio tiempo ni a preguntar que pasaba, ya que, cogí mi bolso y huí hacia el coche , le gritaba que tenía que irme, que no podía más. Mi amigo no comprendía lo que pasaba, arranqué el coche sin que le diera tiempo salir y preguntar lo que me ocurría. Derrape  y me fui de allí,dejando a mi querido amigo plantado y preocupado, en la puerta.
Me dirigí para casa asustada y con el corazón en la mano, me estaba dando un ataque de ansiedad, en la radio sonaba: sin ti no soy nada,de Amaral.
Estaba llorando, el teléfono no paraba de sonar, era Eduardo, no lo cogía, después de la tercera llamada , abrí la ventana y lancé el móvil ,estaba pasando por un bosque que no me sonaba de nada, me di cuenta que me había perdido.
Bajé la velocidad observando por si pasaba alguna sospecha, aparqué enfrente de un árbol y lloraba, solo lloraba, se me habia pasado de todo por la cabeza, desde que era un sueño todo hasta la idea de quitarme la vida.
Algo hizo llamar mi atención , el foco del coche reflejaba  un trozo brillante, no estaba segura,pero bajé del coche.
Aun que fuera de día,el bosque tapaba el cielo haciéndolo oscuro y tenebroso.
Me  encaminé hacia el trozo, era un colgante... No era un colgante simple,era su colgante, el colgante de Diego...
Ese debió ser el bosque donde tuvo el accidente, lo alcancé ,estaba un poco sucio ,de barro en general ,le faltaba la medalla grande ,pero tenía la pequeña .
Lo guardè en el bolsillo, y me metí en el coche de nuevo y arranqué, no quería estar más allí, busqué la salida, me costó ,pero la encontre.
Quería mandar un mensaje a Paula,pero recordé que tiré el móvil por la ventana 🤦.
Llegué a casa, con miedo , y llamé a Paula desde el fijo.

Serendipia  [En Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora