Jiang Chao Ge y el arma espiritual

Capítulo 8

Jiang Chao Ge siempre había sido alguien de fuerte autodisciplina y perseverancia extrema. Una vez que pusiera su mente en algo, definitivamente perseveraría hasta el final, de lo contrario no sería lo que se propuso ser. Solo que su camino de cultivo estuvo acompañado de muchos obstáculos...

— Quiero salir —.Zhi Xuan le dio una palmada en el muslo a Jiang Chao Ge.

Jiang Chao Ge abrió los ojos. Esas brillantes pupilas doradas lo miraron sin pestañear —: ¿A dónde quieres ir?

— No lo sé, quiero salir a jugar.

— Me estoy cultivando.

— No, quiero salir —.Las pequeñas garras de Zhi Xuan tiraron de su cuello, queriendo sacarlo de la cama—: Llévame a beber alcohol, compra cosas para comer. Te morderé hasta la muerte si me dejas comer bollos al vapor de nuevo.

Jiang Chao Ge apoyó la barbilla y jugó con su cabello largo y suave—: ¿No dijiste que no podías  comer ni beber?

—Quiero comer y beber.

Jiang Chao Ge respiró hondo y pensó en silencio en esa palabra en la que tenía que pensar muchas veces todos los días: ¡Debo aguantar! Presionó el pequeño hombro delgado de Zhi Xuan—: Zuzong, lleguemos a un acuerdo. Podemos salir, pero no puedes agarrar lo que ves.

Zhi Xuan le dio una mirada—: ¿Por qué?

— Porque no tengo dinero.

—Esas masas ignorantes deberían entregarme las cosas de todos modos, o de lo contrario me los comeré todos y a cada uno de ellos.

Jiang Chao Ge apretó su rostro—: ¿A quién te comerías eh, a quién te comerías? Solo eres así de grande en este momento.

Zhi Xuan extendió las manos con ganas de abofetearlo y no pudo hacerlo porque sus brazos no eran lo suficientemente largos. Se enojó tanto que sus dos pies golpearon el suelo con fiereza.

— Vale, vale, te compraré alcohol y comida deliciosa, pero hicimos un  acuerdo, no puedes tomar cosas al azar. Te llevaré ahora, ¿de acuerdo? 

Zhi Xuan mostró los dientes y le mostró una expresión feroz, pero combinada con esa cara suave y redonda, realmente fue algo cómico.

Jiang Chao Ge se cambió de ropa, sostuvo a Zhi Xuan y salió.

Ya había estado en la ciudad de Hu An durante cinco días. Estos pocos días, pasó todo su tiempo cultivando. Esas docenas de monedas de cobre que ganaron la última vez se han agotado en estos pocos días. Meng Sheng una vez más comenzó a llevarlos a roer bollos al vapor. Pensó que también era un buen momento para pensar en una forma de ganar algo de dinero o de lo contrario ni siquiera podrían mantener a este Zuzong.

A Zhi Xuan realmente le gustaba salir a jugar, pero Jiang Chao Ge también podía entenderlo. Si hubiera estado inactivo durante muchos años y hubiera visto que el mundo entero era completamente diferente una vez que se despertara, todo lo que miraba también parecería nuevo.

— Esto, dame esto —.Zhi Xuan le dio una palmada en el brazo a Jiang Chao Ge y dijo mientras apuntaba a un pequeño Hombre de Caramelo Dragee.

Jiang Chao Ge vio eso, esa pequeña figura de caramelo era solo una moneda de cobre y le compró una.

Zhi Xuan lo tomó y lo lamió dos veces—: ¡Pah! Asqueroso —.Y quería tirarlo.

— Dámelo, no lo tires—.Jiang Chao Ge lo tomó y le dio un mordisco. Era lo suficientemente dulce como para enfermar a los muertos, pero después de pensar en lo pobres que eran, aún así se lo comió.