-ᴏᴄʜᴏ- ❝ ᴀᴄᴄɪᴅᴇɴᴛᴇ ❞

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Con el corazón roto y los ojos hinchados por el llanto, su sábado comenzó.

Wooyoung era una persona fuerte , toda su vida lucho contra las adversidades que se le presetaban,con la frente en alto y manteniendo su orgullo, además ya había lidiado con San durante dos años de relación, no iba a quedarse echado todo el día para deprimirse más.

No estaba del mejor humor, y si se quedaba demasiado tiempo sin ocuparse de algo, su mente inevitablemente iba hacía los recuerdos con San. Y no quería eso.

Ese día debía ir con el señor Kim,como cada día de la semana (menos los viernes). Era una excusa perfecta para no quedarse en casa a comer helado y llorar su roptura.

Ya no era un adolescente sensible, era un adulto con más cosas en su día que su novio.

Igualmente el amor que tenía por aquel chico era algo de lo que le era muy difícil desprenderse. Más aún cuándo tan doloroso le había sido aquello.

Debía despertar la mente, ponerse en blanco y mirar hacía adelante.

No tenía clases, así que se mantuvo ocupado redecorando el departamento, limpiando y cambiando los muebles de lugar.

En el armario encontró muchos posters de bandas que le gustaban, también carteles de películas y viejos discos que ya no funcionaban.
Con eso improvisó nuevas decoraciones para las paredes de su cuarto y la sala. Le consumió bastante tiempo,puesto que cuando al fin había decidido un lugar para aquellas imágenes, se le ocurría que quedarían mejor en otro.

También se dedicó a revisar su armario, separar ropa que ya no usaba y algunas camisetas de San que no quería volver a ver alli, así que luego las tiraría.

De a momentos,su teléfono comenzaba a sonar, con el nombre del mayor en la pantalla. Colgaba de inmediato.
Realmente no quería hablarle, pero seguía insistiendole,era molesto, y en algún punto debió ser acoso realmente.

Se imaginaba que iba a llegar y tirar su puerta para verlo, pero sabía que no lo haría. Mingi había ido a amenazarlo de que no se le acercara nunca más al menor, y si lo hacía lo mataría.

Quizás no tanto. Pero siendo Mingi,era posible.

Las llamadas se volvieron tan insistentes,al punto que acabó bloqueando el número. Sintiéndose libre de respirar ahora gracias a eso.

Solo debía ser fuerte y mantener la mente ocupada en cosas importantes. Eso lo libraría del dolor que sentía por dentro.

Luego de terminar de decorar, se dió cuenta de que había estado tan emocionado por ese trabajo y la limpieza, que lo había acabado en muy poco tiempo.

Aún faltaba mucho tiempo para ir con el señor Kim, y no tenía nada mas importante que hacer a esas horas. un vacío grande comenzó a invadirlo.

Su primer instinto, fué llamar a sus amigos, preguntar si alguno tenía olanes para esa tarde, o si querían venir a su casa a acompañarlo. Pero, lamentablemente, ninguno podía.

Seonghwa siempre estaba totalmente dispuesto a ir con él, cuidarlo y ayudarlo ahora cuándo se sentía mal por su roptura. Pero tenía trabajo esa tarde, y no podía darse el lujo de faltar.

Llamó también a Mingi, pero la propuesta también fué rechazada por él, diciendo que no podía porque esa tarde iría a conocer a los padres de su novia.

Fué un golpe bajo para Wooyoung. Pensar en parejas llevaba directamente a pensar en San. Y era lo último que quería hacer.

Tenía muchas personas a las cuales llamar,pero no quería estar con ninguna de ellas. Solo quería a sus verdaderos amigos, y ambos estaban ocupados.

𝐀𝐍𝐓𝐎𝐍𝐈𝐌𝐈𝐀  ▍# 𝙎𝘼𝙉𝙒𝙊𝙊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora