All I Want [Ben Hardy Y Tú] COMPLETA✔️

Capítulo 6

6. Adiós Ben.

Las grabaciones terminan por el día de hoy y los actores comienzan a dirigirse cada uno a su camerino.

El rubio camina cabizbajo hacia el suyo y se detiene al sentir una mano posarse en su hombro. Gira un poco el rostro y se encuentra con sus compañeros de cámara.

— Iremos a un bar de por aquí, ¿Vienes con nosotros?

El rubio dirige la mirada de el hombre de barba canosa hacia el otro hombre y les da una pequeña sonrisa.

— Sí, claro.

— ¡Perfecto! Nos vemos afuera — el rubio asiente ante las palabras del latino y vuelve a girar para continuar con su camino hacia el camerino.

Aunque por un momento duda y piensa en cancelar e irse al hotel ya es demasiado tarde ya que se encuentra fuera del lugar caminando hacia el auto de sus compañeros de cámara.

— Vámonos — el latino abraza por los hombros al rubio y este se limita a asentir.

Tal vez, un par de tragos no le harían daño.

Por su parte, la joven chica ya había comenzado a empacar sus cosas, después de hablar durante dos largas horas con su amigo Michael este le había ofrecido una habitación de su pequeño apartamento.

— Tal vez no sea la gran cosa, pero...

— Está perfecto — le interrumpió la chica mientras miraba con detenimiento el lugar y se volvía hacia su amigo — muchas gracias por esto Mike.

El chico le dió una pequeña sonrisa y asintió.

Ahora la joven se encontraba empacando sus cosas para dejar el que alguna vez llamo hogar. Habia decidido comenzar con su ropa y justo cuando comenzó un montón de recuerdos vinieron a ella, entre ellos, el día en el que decidió mudarse con él.

Habían pasado ya seis meses desde que el rubio le pidió a la joven ser su novia, y no podían ser más felices.

El rubio había vuelto a asistir todas las mañanas sin falta por su café, e incluso ya había llevado a la joven a conocer a sus amigos y estos se mostraron felices por la pareja. Pensaban que aquello había sido algo bueno para el joven, ya que nunca le habían visto más feliz, y pensaban que aquella chica era una buena persona con la que rápidamente se habían encariñado.

Justo ahora se encontraban en una pequeña cena en la casa del rubio. Un pelirrojo contaba algo haciendo un par de gestos y movimientos extraños mientras los demás reían.

Después de un buen rato los amigos de la pareja decidieron que era hora de irse y los chicos los acompañaron hasta la puerta y cuando desaparecieron de su hsita regresando adentro.

Vuelven hacia el pequeño comedor y juntos comienzan a recoger la mesa y llevar los platos sucios al fregadero para lavarlos. Mientras el chico miraba como su novia secaba y ponía los platos en su lugar se permitió imaginar cómo sería una vida así con ella.

— Amor — la joven hizo un ruido con la garganta y entonces el chico continúa — ¿Has pensado como sería vivir juntos?

La joven deja de secar el plato entre sus manos y se queda quieta sobre su lugar.

Solo una vez llegó a pensar cómo sería aquello, pero nunca se había imaginado que fuera él quien algún día lo sacará a tema, y ese día había llegado más pronto de lo que ambos imaginaron.

________ intento tomar su postura de antes y el chico siguió con la mirada cada uno de sus movimientos hasta que la vió dar media vuelta, haciendo que sus miradas se encontrarán y la joven sonriera ligeramente.

— Sí Ben, lo he pensado.

El corazón del chico latino con fuerza y dejó que el silencio los invasores por un rato, y poco después fue el mismo quién decidió romperlo.

— ¿Y no te gustaría que fuera así? — los ojos de la joven se abren con ligereza demostrando sorpresa mientras si novio comienza a acercarse von lentitud hacia ella — sé que solo llevamos seis meses juntos, pero desde la primera vez que pasaste la noche aquí, sentí que era una rutina que me gustaría tener siempre — el rubio se detiene frente a la joven y sujeta sus manos entre las suyas — _________, ¿Te gustaría vivir conmigo?

Un jadeo de sorpresa abandona los labios de la joven y el chico espera ansioso por una respuesta. Aún así también se estaba preparando para recibir una respuesta negativa por parte de la chica, y claro que lo entendiera si dijera que no, él sabía que era muy pronto para eso y que si ella no se sentía lista se lo diría.

Vaya sorpresa la que se llevó cuando escuchó su respuesta.

— Sí Ben, me encantaría vivir contigo.

El alivio invadió el rostro del chico y acercándose más a ella unen sus labios en un tierno beso, lleno de amor y felicidad.

Al día siguiente los jóvenes comenzaron sus planes de mudanza y esa misma semana la joven ya se encontraba viviendo en el departamento del chico. Y aunque al principio hubieron algunos disgustos por la manera tan distinta de ser de la pareja, aprendieron a respetar el espacio de cada uno dividiéndose tareas y dedicándose tiempo uno para el otro.

Y para ellos, eso era todo lo que podían pedir para ser felices.

La joven termina de cerrar sus maletas y mira una última vez la habitación que compartió por dos años con el chico. Miro cada rincón de la habitación y sus ojos se detuvieron en el armario entreabierto, ahora este parecía casi vacío, ya solamente contenía algunas pertenencias del chico y nada más.

Tomo la ropa doblada sobre ka cama y guardo cada prenda en su respectivo cajón, eran algunas camisetas del rubio que había usado como ropa de dormir, pero no quería llevárselas, de hecho, no quería llevarse nada que no fuera de ella. Así que cerrando las puerta del armario se giró hacia sus maletas y tomando estás salió de la habitación y cerró la puerta a sus espaldas.

Llegó hasta el final del pasillo y ahí volvió a detenerse a mirar cada rincón del lugar, y en cada uno veía recuerdos felices al lado de su ex-pareja, como si ya solo quedarán los fantasmas. Claro que también hubieron momentos tristes, pero ella solo quería llevarse los buenos y dejar intactos los malos.

Con las lágrimas corriendo libremente por sus mejillas tomo sus cosas y camino hasta la salida donde al abrir la puerta su amigo ya se encontraba esperándola.

— ¿Estás bien? — el moreno le pregunto en un tono suave a lo que la joven se limitó a asentir.

Se abrazaron durante unos segundos y cuando se separaron el chico tomo sus maletas y comenzó el camino hacia la salida dejando a la joven atrás. La joven miro una última vez la entrada y después cerró la puerta y se aseguró de hacerlo bien, dió un paso hacia atrás y girando un poco comenzó su camino hacia su amigo quién la esperaba dentro del elevador.

Subió junto a él en este y por un momento su mente le hizo una mala jugada al mostrarle como un espectro al rubio mientras las puertas del elevador se cerraban.