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Uraraka tenía la costumbre de andar por ahí con Deku y Iida, mientras charlaban sobre los entrenamientos, la escuela, cosas que pasaban fuera de esta y más.

Esta vez no era una excepción caminaban por los pasillos hablando de lo que habían hecho todo el fin de semana ya que los tres habían salido a ver a sus familias.

- Apuesto que tu familia estaba muy feliz de verte Uraraka. - Exclamó Deku con una sonrisa.

- ¡Oh sí! Estaban muy felices. - Respondió Uraraka con una sonrisa.

Mientras caminaban se toparon con un grupo de chicos del 1-B, era de esperarse que entre ambos salones existiera cierta rivalidad.

Pero por suerte hablaban de Midoriya que de alguna forma era bastante social entre todos así que no tuvo problema en detenerse a saludarlos, Ochako y Iida se detuvieron con él.

Cuando una chica de aura extraña y tez morada se acercó a Uraka con un semblante serio, Ochako intentó ignorar el hecho de que la miraba pero era imposible la mirada que puso sobre ella era tan descarada y poco sutil que hasta Iida la noto eh hizo que Uraraka se pudiera del otro lado quedando en medio de Deku y él.

Cuando Deku se percató de esto decidió que lo mejor sería despedirse e irse con ambos. No quería que sus mejores amigos se sintieran incómodos.

Al día siguiente Uraraka despertó con una sensación extraña en la boca, pero no le tomó mucha importancia como de costumbre se levantó se puso su uniforme y salió de su habitación para saludar a todos sus compañeros.

- Buenos días. -

- Buenos días Uraraka. - La primera en saludar fue Yao-Momo que leía y tomaba su café matutino.

- ¡Hola Ochako-Chan! - La segunda fue Asui que peinaba el cabello de Mina miéntras esta se maquillaba.

- Hola Ochako, ¿Me ayudas un poco a ponerme delineador? - Pregunto Mina mientras pintaba sus labios.

La chica de cabellos castaño estaba a punto de decir que no, ya que no sabía mucho sobre el maquillaje y prefería no causar un desastre intentándolo.

- Si, ya te ayudo. - Pero por alguna extraña razón su boca desobedecio por completo a su cerebro, abrió sus párpados con sorpresa.

- ¡Oh! Gracias que amable. - Dijo Mina aun más sorprendida, Normalmente Ochako se rehusaba a esa clase de cosas.

Después de eso sus pies se movieron por sí solos hasta donde estaba la rosada, tomó el delineador y comenzó a temblar algo nerviosa. La mayor parte de la pupila de Mina era negra así que tenía miedo de picar su ojo, con el pulso tembloroso le dibujo las líneas que se debían hacer para llamarlo delineado.

Para su suerte no salió nada mal.

- Listo. - Respondió insegura.

Mina se miró en su espejo de mano, se quedó varios segundos pensativa y después sonrió.

- ¡Me encanta! - Grito emocionada soltando su espejo. - ¿Por qué dices que eres mala si se nota que eres bastante buena?- Alago la rosada.

Ochako solo rió, se encogio de hombros con una enorme sonrisa.

Todo el transcurso del día cada que alguien le pedía o preguntaba algo a Ochako ella respondía Si o una respuesta positiva, aunque ella quisiera decir que no.

Esto alteró mucho a Ochako, ya que no sabía que era lo que pasaba toda la clase estuvo distraída pensando en eso y esto Aizawa lo notó.

- Urakaka. - Llamó su atención.

Está lo miró nerviosa. - ¿Qué ocurre Sensei? - Preguntó.

- ¿Crees que es correcto estar distraída en un momento tan importante como este? - Preguntó el profesor con el ceño fruncido.

Ochako decidió guardar silencio, infló sus mofletes avergonzada para intentar no decir nada ni una sola palabra.

- Uraraka, Responde. - Insistió el profesor.

Ochako sabía que sus palabras serían si y ella no quería ser grosera con Aizawa. Pero su cerebro hizo otra cosa, ella asintió con la cabeza.

Fue suficiente para molestar a Aizawa, este la regaño enfrente de toda la clase, Ochako sólo bajo su mirada avergonzada.

Ese día no podía ir peor.


𝖲𝗂 𝖠 𝖳𝗈𝖽𝗈  ( 𝖪𝖺𝗆𝗂𝗇𝖺𝗋𝗂 𝖷 𝖮𝖼𝗁𝖺𝗄𝗈 ) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora