—¿No crees que esto es algo acosador?
—No —negaba moviendo su cabeza lado a lado—. Le pregunté a México si podía estar aquí mientras ella practicaba y me dijo que sí. No le veo lo malo si tengo su aprobación.
La colombiana miró con extrañes al varón, iba a decir algo, o bueno, quería decir algo, pero no pudo ni formar la oración en su cabeza. Así que mejor lo decidió pasar de largo y volver a fijar su vista en su teléfono celular, casi como si nada hubiese pasado.
El de pecas al ver como su amiga que se hallaba a su lado le ponía más atención al aparato que él, decidió hacer lo mismo pero con la única diferencia de que en lugar de mirar concentrado su celular, mirar a la única y misma chica de siempre.
No podía creer lo bonita que se veía incluso practicando deporte.
Desde las gradas no siempre lograba verla perfectamente bien, pero cada vez que no podía hallarla con los ojos, se movía de un lado a otro hasta encontrarla. Sentía que no podía perderse de nada.
En cambio la mexicana no estaba al tanto del chico. Necesitaba estar concentrada en lo suyo. De igual modo, en uno que otro momento se detiene a verlo y sonreírle, se sentía muy agradecida por la compañía. Aunque también se encontraba aliviada pues, desde la confusión que hubo el otro día, temía que Chile no le dirigiera la palabra. Pero no, parecía estar todo normal.
Y otra vez el profesor cambió de lugar a México, ahora estaba detrás de un tipo demasiado alto. El pobre chileno no podía ni ver la sombra de la pequeña adolescente. Así que, sin pensarlo dos veces, se empezó a mover en las gradas, se levantaba, se agachaba, se iba para la derecha, para la izquierdo, pero nada. Lo único que logró fue pisar el pie de la única persona presente ahí; Colo.
La rubia soltó un quejido asustando al otro.
—¡PERDÓN! NO TE HABÍA VISTO, ESTABA MUY CONCENTRADO MIRANDO CÓMO PRACTIBAN, PERO UN CHICO ME TAPÓ LO QUE DE VERDAD QUERÍA VER Y POR ESO DECIDÍ MOVERME, ENTONCES MIENTRAS ME MOVÍA TÚ-..
—Chile —le interrumpió—, a mí dolió por un mini segundo el pie. A usted parece que le dolió hasta el alma. Así que no se preocupe, está perdonado.
—Eres la mejor —dijo al sentirse aliviado.
La rubia iba a meterse de nuevo en su aparato electrónico para distraerse un poco de la realidad. Mas no hizo mucho. Se quedó mirando su propio reflejo que se da al tener la pantalla en negro. Se miraba y miraba, pero no comprendía.
—¿En serio crees que soy la mejor?
—Ah.. —el adolescente quedó un momento procesando— ..sí, claro. Eres de las mejores chicas que he conocido.
—¿Entonces si se supone que "soy la mejor", por qué aún así Paraguay prefiere a Bolivia que es una cualquiera?
Chile quedó con los ojos bien abiertos y con temor. No se esperaba alguna respuesta así. Quizás debía decirle algo pero, ¿y si arruinaba más la situación?
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𝐋𝐎 𝐐𝐔𝐄 𝐍𝐎 𝐓𝐄 𝐏𝐔𝐄𝐃𝐎 𝐃𝐄𝐂𝐈𝐑 (PAUSADO) ── mexchi.
Romance▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Si no puedo decirte lo que siento con palabras, ¡entonces encontrare otra forma! ︽︽︽︽︽︽︽︽︽ ──᜔Pareja hetero...