Al final florecí.

A tierras del Norte.

A tierras del norte me llevaste, tan cerca de la playa,

Sin embargo, el mar no vi constante sino que entre montes habité cada día.

Conocí un par de buena gente, conocí el verde de las subidas

Y amé a los buenos amigos que me dio en ese lugar la vida.

Yo recuerdo tan bien subir al auto, para luego tirarnos por la pista

Como los espíritus jóvenes que éramos gritamos por la adrenalina y supimos en aquel entonces de qué iba mas o menos la vida.

En el lugar de calor y olores gratos salía el sol de cada monte, la tierra fue fértil y los corazones cansados podían hallar allí paz.

Pensé en la mujer que amé y se había ido, diciéndome bajito que ella pudo ser feliz en ese lugar.

Y extrañamente su presencia se sentía en todos lados, en cada paso, en cada momento del caminar.

Tierra escondida entre montes, tierra escondida lejos de ti, yo me preguntaba como en aquel lugar lejano una persona podía vivir.

Pero vivía tanta gente y yo lo supe bien, allí fue cuando te vi por vez primera, allí fue donde me tuve que despedir.