Meow, misterious Girl.

✼;Capítulo 6

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Hoy es el última día de Momo en casa de Dahyun. Sana se fue con un anuncio que se terminó por confirmar dos días antes. Nadie estaba muy contento con ello. Siendo la mismísima Chaeyoung quién diera la noticia a su mejor amiga, puesto que Sana siquiera tenía el valor para hacerlo. 

Momo no quería irse, no cuando se sentía tan fascinada por Dahyun, no cuando ahora realmente le gustaba. 

Ambas saben lo que sigue, deben despedirse porque será Chaeyoung quien haga entrega de la felina a su antigua dueña. Momo y Dahyun  están en el sofá y Chaeyoung aguarda alejada dándoles espacio. 

Una lágrima empieza a descender por las mejillas de Dahyun y empieza a hipar, de inmediato, cuando Momo se dio cuenta, toma su rostro tal y como la rubia una vez lo hizo. Limpia su rostro y la abraza con fuerza. Su pecho dolía, se sentía frágil y efectivamente ver a su a Dahyun así, no ayudaba en nada.

— No quiero alejarme de ti, Dahyunie. — Menciona triste, siente a Dahyun aferrarse más a ella.

— Nunca me perteneciste, preciosa. Siempre fuiste de alguien más, nunca dejaba de pensar en quién estaría triste por no tenerte a su lado— Su voz se quiebra a la última palabra de nuevo —. Aún así no comprendo por qué duele tanto.

Dahyun suelta un sollozo aún más fuerte y seguida llora Momo en su hombro. 

— Te prometo que nos volveremos a ver, será como la primera vez que nos conocimos.

La rubia ríe y Momo se aleja confundida.

— La primera vez que nos conocimos fue un desastre, Momoring. — Ríe amargamente, sus ojos están hinchados y su nariz está roja.

— No, hablo de esa vez cuando era niña, hace cuatro años. — Confiesa la azabache. Dahyun la mira con los ojos bien abiertos sorprendida.

Dahyun le toma menos de cinco minutos en darse cuenta de lo que Momo trata de decir, porque por alguna razón, tenía la certeza de ello, igual su reacción es tan alegre como nunca.

— ¡Realmente eres tú, Momo! — Dice asombrada — Te encontré de nuevo, pequeña. 

— Creo que ya no estoy tan pequeña. — Se carcajea Momo y coloca un mechón detrás de la oreja de Dahyun.

De nuevo un  silencio se produce. Dahyun ahora estaba aliviada de saber que la pequeña cayó en buenas manos, Sana era demasiado dulce, así que era normal que la felina lo era también, además era muy mimada, ahora sabía el por qué. 

— ¿Eso significa que me buscaste desde el principio? — Se cuestiona la rubia.

— En realidad no, fui tras de tu amiga, Chaeyoung. Me había perdido y realmente creí que ella me ayudaría a volver a casa, pero terminó por dejarme en tus manos. — Terminó por decir un poco decepcionada.