Together || LevYakuLev Week ||

Day 1:

𝑃𝑟𝑜𝑚𝑝𝑡𝑠:

𝐷𝑎𝑦 𝟷: 𝑆𝑜𝑢𝑙𝑚𝑎𝑡𝑒 𝐴𝑈 || 𝑀𝑢𝑡𝑢𝑎𝑙 𝑃𝑎𝑖𝑛𝑖𝑛𝑔 || 𝐶𝑜𝑛𝑓𝑒𝑠𝑠𝑖𝑜𝑛.

𝑃𝑟𝑜𝑚𝑝𝑠 𝑒𝑠𝑐𝑜𝑔𝑖𝑑𝑜:『𝑆𝑜𝑢𝑙𝑚𝑎𝑡𝑒 𝐴𝑈』

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Juntos incluso más allá.

En el mundo todos están destinados a volverse a encontrar con aquellas personas que amaron en su vida anterior. Sin importar que tan lejos esté, sin importar en que trabaje, sin importar nada; ellos volverían a estar juntos.

Estos destinados nacen con el nombre de su otra mitad escritos en la muñeca como si tuvieran tinta en la sangre, pero éste el cual se mantendrá oculto hasta el momento que se vuelvan a encontrar. Como si fueran un candado abriéndose el nombre se mostrará en la piel.

Lev Haiba desde que era apenas un niño siempre se cuestionaba quien era su compañero del alma. Escuchaba siempre de forma atenta la historia que le contaba su madre sobre como encontró a su padre por las frías calles de Rusia. Se preguntaba constantemente a qué tipo de persona amó en su vida pasada, qué tipo de relación tuvieron... O si había llegado a encontrarla de verdad.

Así es como el joven semi-ruso creció checando constantemente su muñeca cada vez que conocía a alguien nuevo, aunque también recordaba las palabras que sus padres le decían junto a la bella historia de amor.

"─Cuando conozcas a tu compañero del alma, no sólo aparecerá su nombre en tu muñeca, aquello va mucho más allá que eso. Sientes que se llena ese vacío interior y que encontraste tu lugar en el mundo. Sientes que tu corazón no volverá a llorar nunca más y lo único que producirá es un cálido y profundo amor"

Ahora, el chico soñador, abandonaba a sus 15 años los fríos suelos rusos para ir al calor de Japón. Gracias a que sus padres consiguieron mejores trabajos, tomaron la decisión de mudarse al país del sol naciente. Los hermanos Haiba, a pesar de que se sentían algo tristes por abandonar su tierra natal, estaban bastante emocionados por conocer su nuevo hogar. Habían visto Japón únicamente por programas de televisión y series de ciencia ficción –aunque no se fiaban mucho de ésta- les resultaba interesante y más ahora que estarían viviendo en la capital, un lugar con grandes y luminosos edificios donde la vida nocturna era muy notoria.

Con el paso de los años, Lev había dejado un poco de lado el tema de su compañero del alma, en comparación a cuando era un niño. A pesar de que ya no era primordial, aún lo tenía presente, pero por ahora sus padres le habían pedido que se dedicara a sus estudios y que diera lo mejor de sí en su nueva escuela, con el cual iniciaba una nueva etapa escolar la preparatoria.

Ya en las tierras niponas, los Haiba encontraron una buena residencia donde vivir en un lugar tranquilo de Tokio y el arriendo no era tan caro a pesar de ser la capital. Una bella casa de estilo occidental con lindas terminaciones clásicas del país. Gracias a su padre, a Lev no se le complicaba hablar japonés, de echo, cuando vivía en Rusia estaba acostumbrado a hablar japonés en su casa y no tanto ruso. No pasó mucho para que pudieran instalarse de forma cómoda, aunque faltaban algunas cosas tenían lo necesario.

Todo estaba junto a tiempo. Dus padres ya comenzarían a trabajar y él comenzaría clases en una escuela relativamente cercana a su casa que quedaba algo lejos, pero Lev comentó que no le importaba caminar hasta la estación de trenes. Tendría que memorizar cual era la estación que tenía que quedarse para no pasarse, pero, poco a poco, se acostumbraría.