Break Me _YoonMin_

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– Escúchame bien Jimin, seguirás con ese matrimonio quieras o no

Su mejilla quemaba y un terrible nudo en la garganta se hacía presente, sus ojos pedían a gritos llorar, pero él se negaba a sí mismo, el hombre al frente suyo parecía estallar en furia, lo desconocía. Hizo puños sus manos, cargo fuerzas para ponerse de pie y enfrentar cara a cara a SungHoo

– Puedes golpearme, pero no seguiré con esto – dijo ante el hombre.
SungHoo levantó la mano de nuevo y Jimin solo cerró los ojos en espera de un nuevo golpe, pero este no llegó, a cambio escucho a su padre hablar una vez más

– ¿Es una amenaza? – sonrió restante, Jimin abrió los ojos para encontrarlo cruzado de brazos – Tu mismo has visto de lo que soy capaz, ahora te pregunto si aún tienes el valor de repetir esas palabras ante mi

Amenaza, eso era lo que SungHoo acababa de hacerle, pensó Jimin, trago sus palabras junto al nudo en la garganta. Entonces pensó que era correcto y que no

...

Wheein recién terminaba la leche de YeonJun, movió el recipiente una vez más y camino a la habitación de su pequeño, al entrar su corazón se detuvo cuando escuchó pequeños jadeos, corrió hasta a cuna del niño, YeonJun se hallaba con la boca abierta luchando por respirar

– ¿YeonJun? ¡YeonJun! – gritaba mientras lo cargaba, el niño parecía no reaccionar, más seguía intentando recibir algo de aire. Wheein tomó su teléfono, con lágrimas en los ojos marco el primer número en la lista de contactos. Describir lo que su corazón sentía era inexplicable

– ¡Namjoon! YeonJun está mal – dijo sin espera – está muy mal – lloro aún más fuerte, ella movía las manos del pequeño niño como le habían explicado hacer en estas situaciones, pero ¿porque no daba resultado? YeonJun seguía jadeando y moviéndose, había comenzado a quedar pálido, había soltado el celular, escuchaba a Namjoon hablar, ella solo pudo gritar – ¡Rápido, por favor!

Kim ya se encontraba en el auto en dirección a ellos, estaba temblando, asustado, no quería perderlo

...

Estiro las manos y movió la cabeza, estaba más que cansado pero su turno terminaba en un par de hora, solo podía pensar en llegar a casa y descansar. El día había sido agotador, pero estaba a punto de acabar, suspiro y tomo su tableta para mirar que pendientes quedaban, agradecía que no hubiera nada más; camino por los pasillos saludando a un par de enfermeras que pasaban, SeokJin era un medio reconocido, era lo que siempre anhelo, ese era su sueño volviéndose real. Sonrió para sí mismo pero aquella tranquilidad se vio empañada cuando al final del pasillo pudo ver como un par de paramédicos ingresaban al hospital a un pequeño, detrás de ellos pudo ver a Wheein y Namjoon

SeokJin se apresuró a llegar a ellos
– ¿Que ocurre?

Wheein estaba llorando, seguía muy de cerca a los paramédicos que llevaban a su pequeño mientras unas enfermeras llegaban a suplirlos

– Mi bebé está mal – sollozo con voz temblorosa – por favor, por favor SeokJin – le sujetó el brazo – sálvalo, te lo ruego

Su voz rota y angustiada le rompió el alma, era la voz de una madre que teme y sufre por su hijo, Wheein estaba delante, con la mirada puesta en él, sujetaba su brazo con tanto anhelo, con fe en que el pudiera salvar lo que ella más ama. La mirada de SeokJin dio en la persona a las espaldas de la mujer, Namjoon posaba una mano en el hombro de Wheein y de igual manera lo miraba suplicante. No hacía falta que dijera alguna palabra, tampoco hacía falta que se lo pidiera

– ¡Rápido! Lleven al niño a emergencias

Corrió junto a las enfermeras, dentro del área de emergencias, necesitaba estabilizarlo, colocó un nebulizador para estabilizar su respiración