La Sombra Detrás De Mi

3. Otra Vez

Llegue a casa a las 5:56am, tenía que prepararme para ir a la escuela.

Me di un baño largo pensando en el chico desconocido, Mathius, era un chico lindo por fuera, pero ¿que tan lindo era por dentro?.

Las cosas que dijo no me parecieron nada agradables, el encanto fue efímero, como cuando vas por primera vez al mar y ves lo hermoso que es desde la orilla, y entre más avanzas, y te alejas de la orilla llegan las olas llevándote de un lado a otro y sientes miedo de ahogarte, hasta que logras salir de ahí de vuelta a la orilla, arrepentido de querer sumergirte más allá y ya no te dan ganas de volver a avanzar, no te dan ganas de volver a entrar, así de efímero fue.    

Me miré en el espejo mientras me aplicaba crema en la piel, desodorante para no oler a mico en clase y un poco de perfume de bebé (me encanta oler a bebé), me puse una camisa ancha que me llegaba unos cuatro dedos por encima de la rodilla color anaranjada con una correa negra en la cintura, unas medias negras de mallas y unas botas negras.

Me encanta la ropa, a veces diseño mi propia ropa, uno de mis hobbies es el diseño de moda, de verdad me encanta.

Me seque el cabello, me puse una pañoleta negra en la cabeza, y por ultimo me puse una pulsera de piedritas negras, tomé mi mochila, nuevas papitas de limón y los libros para las clases del día viernes. Bajé escaleras, mamá ya estaba despierta, lista para trabajar y estaba preparando nuestro desayuno.

— ¿Como amaneció la mujer más hermosa de la casa? — pregunta mi madre al verme

— Me hago exactamente la misma pregunta, ¿cómo amaneciste mamá? — le dije mostrándome a la expectativa y ella soltó una pequeña risa

— Yo un poco cansada hija, ayer me toco trabajar hasta tarde porque una compañera no pudo asistir y tuve que cubrirla — mamá se veía muy agotada

— Necesitas descansar mamá, ¿y si te tomas un día libre para ti? — le digo mientras veo como se masajea el hombro derecho

— No puedo hija, tengo que completar mis ahorros porqueeee — alarga literalmente la "e" con mucha emoción y yo estoy esperando que continúe — pronto te graduarás y quiero que celebremos en grande con toda la familia — me dice mi madre entusiasmada, ama las celebraciones

— Ni me lo recuerdes mamá, estoy un poco nerviosa por eso, además... — observo la foto de nuestra familia en el refrigerador, incluyendo a papá y a Dilan. Bajo un poco la voz — No sé si quiera celebrarlo en grande —mamá entiende perfecto lo que trato de decir

— Hija, es tu graduación — me dice tomando mi rostro, le doy una sonrisa y asiento — De todas formas piensatelo, es un día especial.

— Esta bien, lo pensaré mamá — le digo conteniendo un pequeño nudo en la garganta

Mamá me llevó a la escuela para luego irse a trabajar.

— Pasala increíble Keitlyn, recuerda que es tu último año en la escuela — me dice mamá con una sonrisa y yo se la respondo

— lo haré mamá, te amo — le digo y luego me dirijo hacia la entrada de la escuela

Siento de repente que unas manos cubren mis ojos desde atrás, reconocería esas manos de cualquier manera, así que lanzo un codazo hacia atrás y le doy en el abdomen dejándolo sin aire.

— ¡LOUIS!, OH POR DIOS, NO SABÍA QUE ERAS TU — le dije a mi mejor amigo exageradamente

— Estoy seguro que sabias que era yo — me dice en voz baja, sobando su abdomen y un poco encorvado por el dolor del golpe

— Lo mereces, por no pasarme el trabajo de matemáticas — le dije disfrutando mi venganza

— Keitlyn, no te pase el trabajo, porque me tomé la tarea de hacertelo — me dice el levantando una carpeta en su mano hacia mi, y yo quedo sorprendida