TAZÓN 10 [1/2]

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Delicioso wonton de camarones y ramen picante


El corazón de Gyogung se sacudió con fuerza cuando vio que los ojos afilados de su novio se encendieron en el momento en que terminó con su prohibición. Ni siquiera tuvo tiempo de parpadear cuando Bamee se apresuró y besó sus labios. El joven lujurioso y demoníaco atacó sus suaves labios con tanta avidez como si lo hubiese obligado a 'morirse de hambre' por tanto tiempo. Grandes manos se aferraron a su pecho apretando antes de tirar impacientemente de la delgada camiseta que llevaba puesta.

"Mee ..." dijo Gyogung apenas por encima de un susurro, pero el dueño de dicho nombre no le dio la oportunidad a su novio de seguir hablando. Volvió a devorar esos labios y empujó al otro hombre hasta que cayó en el sofá. Luego apretó y toco todo el cuerpo suave hasta que la piel clara y suave floreció con marcas rojas antes de mover su rostro para acariciar y pellizcar el cuello de Gyogung.

"Hahhh ... Mee ... hahhh ... cálmate ..." El devorado trató de hacer retroceder al otro hombre, pero Bamee, que estaba tan consumido por la lujuria, solo gruñó en respuesta y acarició su rostro por todo el cuello y los hombros estrechos. Arrastró la punta de su lengua hasta la parte superior del pecho de Gyogung y lamió esos pequeños nudos rosados que se pusieron rígidos por la excitación.

"Ahhh ...!" Gyogung lanzó un grito agudo cuando su lujurioso amante se olvidó de sí mismo y mordió los pezones en el calor del momento. Parecía que Bamee pensó que chupar esas protuberancias ayudaría a calmar el dolor. Aumentó la fuerza de sus succiones aún más cuando Gyogung arqueó la espalda y empujó su pecho con más fuerza contra él, tanto que Gyogung gimió incontrolablemente. Cuando estuvo satisfecho con el sabor y el tacto allí, arrastró la parte superior de la lengua hacia abajo hasta que llegó al estómago liso. Luego bajó el pantalón de Gyogung, deslizando su lengua caliente, por su parte sensible al espacio entre la pierna y el torso que tanto amaba. Lamió hasta quedar satisfecho con el toque antes de dirigir su lengua hacia la dura y tensa vara de carne, cubriéndola con la boca. La fuerte y dura chupada fue tanta que Gyo apretó sus nalgas.

Bamee estaba un poco enojado consigo mismo por no haber escondido ningún lubricante en la sala de estar. Ahora que han llegado tan lejos, no había forma de que perdiera el tiempo llevando a su dulce novio a la habitación. La única forma de resolver el problema en el que él podía pensar era hacer que P'Gyo llegara primero a su clímax. Ahora que había tomado esa decisión, el joven gigante aumentó la velocidad y la fuerza de su boca, así como los golpes de sus manos. Los gemidos de excitación y el derretimiento de los huesos lo hicieron girar de ese cuerpo delgado empujando el autocontrol de Bamee. Soltó los labios y aumentó la velocidad de su mano y muñeca. No mucho tiempo después, se encontró con éxito cuando su querido novio lanzó la evidencia de sus deseos en su mano.

Ahora que tenía una lubricación natural, el Sr. Bulto no perdió un segundo. Frotó el líquido resbaladizo sobre su longitud endurecida y usó un poco para preparar la apertura de Gyogung. Bamee deslizó su dedo adentro, facilitando el camino para algo más grande; todo se hizo tan rápido que Gyogung no tuvo oportunidad de recuperar el aliento. El joven entrenador saltó un poco cuando sintió que algo se deslizaba dentro de sí mismo. Su corazón golpeó con fuerza contra su pecho cuando ese dedo grande comenzó a moverse hacia adentro y hacia fuera. Poco después, el hombre impaciente agregó más dedos, empujando y saqueando hasta que su novio apenas pudo soportarlo.

"Err ... hahhhhh ... no ... no ... no cruces el dedo ... ahhhh". ¡Esa dulce voz rogó en un susurro, pero no había forma de que su lujurioso y diabólico novio se detuviera! Bamee mostró una sonrisa maligna y agregó otro dedo, curvando y torciendo los apéndices mientras miraba la cara de su amante y las expresiones excitadas pintadas por todas partes. El sonido de una respiración agitada siendo absorbida por una boca abierta y el gemido de su nombre empujó al joven a su límite. Sacó su dedo y agarró su gran dureza y la presionó cerca de la abertura suave y cálida. Sin embargo, antes de que pudiera entrar, una pequeña mano se extendió y empujó ligeramente contra su estómago.

El caliente Bamee y su delicioso Gyogung [#น้องบะหมี่พี่เกี๊ยวกุ้ง]Where stories live. Discover now