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                                                                                           Sophie

-¡QUE VENGAS AQUÍ TE HE DICHO!- yo corría detrás de él pero no había manera de atraparlo.

-¡Cójeme hermanita!- me decía mientras corría

-NOAH ME ESTOY ENFADANDO- al fin lo atrapé, y le golpeé la cabeza

-Sophie, no hacía falta que me pegaras, me has hecho daño-

-Lo siento pero sabes que me da mucho coraje que me quites las cosas-

-Sí, vale perdón ya está era solo una broma- parecía un poco molesto, era normal al fin y al cabo solo había sido una broma

-¡LOS DOS PARAR YA! BAJAR A CENAR- papá parecía bastante enfadado. Los dos bajamos corriendo

Noah se sentó en frente de mamá y yo en frente de papá.

No había nada raro en nuestra vida, éramos una familia normal. Mi hermano y yo no éramos para nada especiales; íbamos al instituto todos los días, teníamos nuestros amigos, nos peleábamos... Cosas normales.
O bueno, eso creía yo.

[...]

-¡Noah venga despierta que llegaremos otra vez tarde al instituto!-

-Si ya voy perdón-

Terminamos de vestirnos y bajamos corriendo esperando a que papá terminara y nos llevara al instituto.

-Sed buenos y no hagáis de las vuestras, ¿vale?- nos dijo papá, porque a mi hermano y a mi ya nos habían llamado la atención más de una vez...

-Que si...- bajamos del coche y Noah se dirigió a mí- bueno te espero en la salida ¿vale?-

-Sí vale, adiós- le despedí tras un movimiento con la mano y fui a buscar a mis amigas

En mi instituto no había nada fuera de lo habitual, todo era bastante aburrido. No es el típico en el que siempre sucede algo interesante y todo el mundo se lleva bien... No. En mi instituto somos mas bien de pelearnos por estupideces y cotillear sobre la vida de los demás. Todo el maldito tiempo.


Iba andando por el los pasillos en busca de mis amigas, cuando me choqué sin querer con alguien

-Cuidado joder- me giré hacia la voz masculina que me había prácticamente gritado

-Relájate  que ha sido sin querer- lo miré con cara de asco y me fui.

-¿Que acaba de pasar?- me dijo Maddie, era una de mis amigas, que acababa de presenciar aquella escena

-No lo sé, me he chocado con él sin querer y me ha gritado, me parece que alguien es más irrascible de lo habitual-

-Pues si, es el típico crío engreído al que no le puedes dirigir la palabra por el simple hecho de que se cree superior a los demás- las dos lo mirábamos con desagrado

-Joder lo has descrito tal cual- le dije mientras me reía, ella me devolvió la sonrisa

Sí, ese era Harrison, Finn Harrison, un fuckboy de esos, y la verdad es que me caía bastante mal, solo se dedica a jugar con los sentimientos de la gente (chicas para ser más exactos). Pero lo peor de todo es que mi hermano y él son prácticamente inseparables, a cada lado que iba Noah, él también, lo que significaba que normalmente nos teniamos que soportar cuando salian juntos. No sé cómo se aguantaban.

-Vamos a la clase de mates ¿no?- nos habló Sarah desde atrás. Si, ella era mi otra amiga

-Sii- le respondí- pero ir yendo vosotras que tengo que dejar en la taquilla un libro

-Vale- Dijeron al unísono, y las dos se fueron

Desgraciadamente, tenía la taquilla en frente de las de los amigos de Finn...

-Harrison y su grupito ¿podéis dejar de mirarme fijamente?- les dije, no paraban de mirarme el culo.

-Y tu Clarke, ¿puedes dejar de ser tan insoportable?-

-¿Y tu dejar de ser tan gilipollas?-

-En serio, no se como consigues siempre sacarme de mis casillas- me dijo. Los otros solo miraban

-De hecho, lo hago a propósito- lo miré de arriba a abajo y me fui.

Llegué a clase y la verdad fue bastante aburrida. Pero es lo que tocaba, estaba en cuarto curso y solo me quedaba ese año para acabar el insti.

-¿Han mandado deberes?- le pregunté a Sarah que siempre llevaba los apuntes al día

-No, creo que no, pero la verdad no estoy segura-

-Da igual en realidad tampoco los iba a hacer- las dos nos reímos tras mi comentario mientras esperábamos a Maddie que siempre tardaba años en recoger sus libros.

-Venga vamos a dejar esto a mi taquilla y nos vamos que mi hermano se va a poner nervioso como tarde en salir- les dije, ellas asintieron y me acompañaron a la taquilla

-¿Hay que coger Biología? Es que no se qué tenemos mañana- las chicas no me prestaron atención ya que estaban más pendientes de otra cosa

-Sophie mira- miré disimuladamente hacia donde me indicó Maddie, y vi a Finn liándose con otra chica. La verdad que no sabía ni quién era, cada día se liaba con una diferente- dios cada día se tira a una distinta- repliqué

-La verdad es que si, no entiendo cómo semejante ser humano puede tener amigos- dijo Sarah

-Pienso lo mismo- respondí riéndome, cerré la taquilla y nos fuimos a la salida a esperar a Noah

Llegamos y me despedí de Sarah y Maddie ya que mi hermano estaba esperándome, pero no estaba solo.

-¿Jacob?- hacia tiempo que no lo veía y mira que era del grupo de amigos de mi hermano, y siempre solía estar con ellos

-Hola Sophie, hacía tiempo que no te veía- hizo un amago de risa

-Igual, ¿dónde te habías metido?-

-Nada, es solo que últimamente he ido bajando en mis notas y mis padres no me han dejado salir, me decían que fuera solo de casa para ir al insti y del insti para mi casa- dijo sin aún borrar la sonrisa de su rostro. Pero en realidad me dió pena

-Ostras que putada ¿no?-

-Pues si-

Tras esta pequeña charla, llegamos a casa. Nos despedimos de Jacob y nos dispusimos a entrar.
Pero ese día todo cambió. Mi hermano fue a meter la llave cuando se detuvo. No sabía que pasaba.

Siempre JuntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora