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Sophie

Estaba esperando a los chicos, cuando se me cayeron sin querer los cascos de la mochila. Me iba a agachar a recogerlos, pero alguien lo hizo a la vez que yo.

-Perdón- dije, ya que al agacharnos a la vez chocamos nuestras cabezas.

- No pasa nada Sophie- me dijo Ethan. Estaba deseando abrazar a ese niño, hacia tiempo que no lo veía. Creo que sus padres habían decidido hacer un viaje por negocios y él se tuvo que ir con ellos también.

Grité como una niña pequeña llamando la atención de mi hermano y sus amigos, pero me dio igual. Le di un enorme abrazo a mi mejor amigo y luego nos separamos quedando frente a todos.

-¿Qué? Joder, ¿nunca habéis abrazado a alguien?- dije

-Asi... No- dijo Lucas

-Bueno vale- dije de mala gana, cogí a Ethan y nos adelantamos al grupo, ya que nos acompañarían a mi hermano y a mí a mi casa

Íbamos de camino, yo iba tranquila hablando con Ethan, cuando noté que me pegaron un tirón y me arrancaron el móvil de la mano. Yo me asusté

-Joder que susto Harrison, dame el móvil- se puso delante mía, y como era más alto que yo, no llegaba

-Venga, estírate y cogelo-

-Que pesado eres de verdad, paso de ti- me dirigí hacia delante con Ethan de nuevo

-Que amargada eres- Sentí que me metió el móvil en la mochila

Ese tío era bipolar, un día me odiaba y me hablaba mal, y al otro intentaba bromear y ser amable conmigo. Pues lo siento, pero eso de aguantar a alguien que cada día se comportaba diferente, no iba conmigo. Vamos creo que a una persona con dos dedos de frente también le molestaría.

-Gilipollas- le solté

Al fin llegamos a mi casa tras un camino corto, pero que se me hizo demasiado largo.
Noah se despidió de todos y yo volví a abrazar a Ethan. No quería que se fuera.

-¿De mi no te despides?- oí su irritante pero al mismo tiempo desafiante voz

-Ni en tu sueños Harrison ¿Por qué no simplemente pasas de mí? Guárdate todas tus estupideces para otra persona-

-Es que me resulta más divertido molestarte a ti- lo miré mal y entré a mi casa ignorando lo último que había dicho. Sentía la mirada de mi hermano clavada en mi, mientras que sus amigos observaban atónitos aquella situación.

Saludé a mis padres lo mejor que pude, no sabía cuanto tiempo más iba a poder ocultar el hecho de que sabíamos todo lo que había pasado. Pero bueno con tal de estar bien con mis padres, haría lo que hiciera falta.

Ayudé a mi madre a poner la mesa mientras mi padre terminaba de hacer su "plato especial" que en realidad estaba bastante malo, pero era muy divertido verlo con toda su ilusión hacer el plato para los cuatro... Iba a echar de menos eso.
Noah entró algunos minutos después porque se quedó hablando con sus amigos en la puerta.
Cuando nos sentamos todos a comer, papá y mamá nos empezaron a contar cómo les había ido el día, tan normales y felices. Mi hermano y yo nos mirábamos extrañados, pero solo con mirarnos, entendimos que era mejor disfrutar esos momentos, ya que no íbamos a tener muchos más.

-Papa, la comida está buenísima- dije

-Todos sabemos que eso no es verdad-

-Noah!- le di un golpe en el hombro mientras oía a mamá reírse

-De todas formas no volveré a cocinar-

Al oír eso, nuestras risas pararon en seco, tanto la de mi madre como la de mi hermano. Mamá miró con cara de asesina a papá.

-Quiero decir que como cocino tan mal, no lo haré más veces- Papá, si tan solo supieras que lo sabemos todo...

Una hora después, estaba en mi cuarto terminando de hacer mis queridas matemáticas, cuando entró mi hermano y me sobresalté:

-Sophie! Creo que ya lo tienen todo hablado y firmado, y de hecho, creo que finalmente ya se han separado-

-¿Qué? ¿Por qué? ¿Que ha pasado?-

-Porque los he oído decir que ya que lo tienen casi todo listo y todo firmado, y que ya mismo tendrían que ir preparando el momento en el que- lo interrumpí

-Si, te he entendido-

-Pues...- hizo una pausa corta, pero a la vez desesperante- ¿Qué vamos a hacer?

-Noah ¿Qué quieres que hagamos? Simplemente esperaremos, no hay mucho más...-

-Tienes razón, pero es que... No es fácil de llevar- se sentó en mi cama. Yo me levanté de mi escritorio, caminé hasta los pies de mi cama y me senté a su lado

-Lo sé... Pero vamos a seguir estando juntos, pase lo que pase, ¿Vale? Noah, eres mi hermano joder, tendrás que aguantarme el resto de tu vida- él se rió ante mi comentario, pero pude notar sus lágrimas apunto de caer.

-Te quiero Sophie- Me lanzé a sus brazos, necesitaba abrazarlo.

Todo esto nos estaba afectando bastante, ¿a quien no le afecta que sus padres se separen? Quiero decir, mamá y papá siempre nos habían criado en un entorno bastante unido, y ahora nuestra familia se iba a romper... Pero también el hecho de mudarnos me asustaba bastante.

Todo esto, iba a ser ¿bueno o malo?

Siempre JuntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora