Alas Purpuras

44. Cena de gracias

Guarde la carta en un sobre, tome las tijeras y le corte un pequeño mechón a William, que metí en aquella bolsita, además de unas pocas semillas de Cacao, le acomode mis cosas a Istak y este frotándose en mi cabeza una vez más, salió volando por la ventana, después mire a William que estaba durmiendo.

—Mi padre, ahora te conoce...pequeño mío.

—Eres la única persona que conozco—me gire espantada para ver a Historia en el marco de la puerta—que puede ser amiga de un águila y dejarla estar cerca de William.

—Es un hermano...—Historia me sonrió, se acerco y me abrazo, como siempre le acaricie la cabeza que ahora siempre estaba peinado en una trenza—¿cómo estas?

—Bien, algo cansada, pero todo va muy bien—se separo de mí, mientras que se acercaba a la cuna—hola pequeñín—susurro, pero William abrió sus ojos y comenzó a reírse un poco mientras que le extendía las manos a Historia, esta encantada lo levanto—ya entraste en calor, si, estás calientito—me senté en la cama mientras veía como Historia estaba encantada jugando con William.

—Ya llevabas bastante sin venir, William te extraño demasiado.

—¿De verdad? —me miro con una sonrisa, luego de nuevo al bebé—perdóname, pero tengo bastante trabajo con la activación de la muralla María.

—¿Cómo van las nuevas reformas? —Historia se sentó a mi lado mientras arrullaba a William que comenzó a quedarse de nuevo dormido.

—Vamos bien, falta mucho para poder regresar las casas a como estaban antes y con la nieve estas se atrasaron, pero, logramos avanzar mucho durante el otoño, muchos de los que se postularon a ayudar eran personas que antes vivían en ahí, así que estaban emocionados.

—Espero que todo salga bien, conozco a una señora, que antes vivía en la muralla María y eta emocionada de poder arreglar su casa e ir a vivir ahí con sus hijos.

—¿Dónde conociste a la señora?

—Mercado.

—¿Dónde siempre ibas a comprar la comida?

—Si—sentí un ligero golpecito en mi pie, cuando mire había abajo, estaba Fleck insistiendo que la tomara en brazos, al cargarla se restregó en mi vientre para después irse a las almohadas a dormir un poco.

—Creo que no quiere jugar hoy conmigo.

—Esta cansada, en esta época del año para ella es muy difícil...prefiere estar tibia y tranquila, en vez de pasar frío.

—Allium, vine por que quería verte y también, ya te buscan en la cocina.

—Muchas gracias—me levante y tome una cinta para poder amarrar mi cabello en una coleta, tome mi piel para acomodarlo en el centro de la cama, cerca de la chimenea para tomar a Fleck y ponerla ahí—¿vienes? —le pregunte mientras tomaba los granos de cacao.

—Si—se levanto con William en brazos y caminamos hasta llegar a la cocina donde estaban algunos soldados ya con la comida ordenada, en el momento en que vieron a Historia se pusieron firmes como árbol joven.

—Reina Historia.

—Buenas tardes.

—¿Ya esta todo listo?

—Si—los soldados al ver que Historia no estaba mostrando una actitud diferente a la mía, se relajaron un poco, Armin y los demás al momento de verla se alegraron mucho.

—Muy bien, comencemos con preparar la carne, en lo que hacemos el pan, terminamos con las verduras y cocinamos la carne.

—Si—todos se pusieron a ayudar, Mikasa se quedo con Historia cuidando de ella y también jugando con William, Levi apareció en la cocina una vez que ya todo estaba listo.