9

1K 62 0
                                    

╔═══━━━─── • ───━━━═══╗

╚═══━━━─── • ───━━━═══╝

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

╚═══━━━─── • ───━━━═══╝

NEGACION

════ ❁ ❁ ♡ 🎈 ♡ ❁ ❁ ════

— Por favor, señorita Torres. No puede irse hasta que... - indicó a Nathalia el oficial Harold Gardener.

— ¿Cuántas veces tengo que repetirlo, son idiotas? - exclamó Nathalia con furia y desespero al ver por tercera vez consecutiva, el gran reloj del edificio frente a ellos - ¡No se nada de el desde hace mas de 10 años!  

— Empecemos otra vez – dijo Jeffrey Reeves, el compañero de Harold - Usted fue su compañera sentimental por mas de 5 años, según lo que ha dicho

— Si 

— ¿Y me dice que no sabe nada de el? ¿Ni sus redes sociales?

— El desapareció de mi vida tan pronto termine con el compromiso - explico Nathalia con aburrimiento - ¿me dirán por que hacen esto? Ya me tienen mareada por seguirme desde que salí del cuarto

— El señor Frost lleva desaparecido mas de 72 horas - Nathalia frunció el ceño. Al parecer le encantaba desaparecer de la vida de los demás, como si nada hubiera pasado - Usted es una de las sospechosas. Así que no pierda mas su tiempo y ayúdenos ¿quiere?

— Pierdo mi tiempo con ustedes - vocifero - Tengo que estar en menos de 24 horas al otro lado del país - señalo el reloj 

Reeves sacó un paquete de Marlboro del bolsillo de su camisa y cogió uno. Luego tendió el paquete a Nathalia

— ¿Un cigarrillo?

—  No - respondió segura mientras negaba con su cabeza - No fumo

— Pero su histori...

— Eso es pasado - espeto con asco. Por un momento logró verse a ella de 13 años, acompañada de una chica pelirroja y un chico de grandes anteojos. Beverly Marsh y Richie Tozier se encontraban acompañándola, mientras fumaban cada uno un cigarrillo. 

Reeves dio una calada profunda bajando la cabeza, el pelo grasiento le cayó sobre los ojos y exhaló el humo por la nariz captando de nuevo su atención.

— Tal parecer que nos dice la verdad - dijo Harold 

— Si me permiten, tengo un par de infracciones que cometer - despidió con fastidio y se encamino en busca de su auto a gran velocidad. 

Cuarenta minutos después, sintiéndose como si hubiera salido de un encierro, purificada, de algún modo, arrojó sus maletas al maletero de su BMW y sacó el coche del garaje. La luz ya menguaba. Miró su apartamento, con sus nuevas plantas decorando la entrada y el gran jardín que lo rodeaba, con sus nuevas plantas y sintió la convicción de que jamás volvería a ver nada de todo eso, que era un muerto ambulante.

BLIND LOVE Chapter 2 (Ben Hanscom)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora