Cuando llegué al edificio, esperé impaciente en el ascensor. Caminé por el largo pasillo hasta llegar a mi puerta. Al abrirla, enciendo la lamparita que da a la sala y lo primero que veo al revelar la luz es la fina espalda de Riley Cooper en pantaloncillos de colores junto a una chica.
La joven completamente desnuda, reposando en mi sofá, con las piernas abiertas.
Ahogo un grito, permitiendome explotar por dentro. Abro mis ojos como platos impactada de la imagen.
—¿Pero qué carajos? ¡¿Riley?!—espeté sobresaltando a la chica. Ella se cubre con una de mis cobijas con expresión de horror mientras Riley más relajado me observa extrañado. En el suelo estan tirado sus pantalones y camiseta.
— Maldición, Maggie, ¿Qué haces aquí?—se quejó en voz ronca, cubriendo su zona pelvica con sus manos apenado. En sus mejillas hay cierto enrojecimiento, y sus ojos estan enfocados en alguna parte del panorama.
—¿Quién es esta?—indaga la chica invasora con acento extranjero.
Riley abrió su boca para pronunciar alguna silaba pero fue interrumpido por mi voz de inmediato.
—Esta será la que te sacará a patadas sino levantas tu trasero ya mismo de mi sofá italiano.—gruñí con fuerza.
Mi mal humor apestaba el ambiente. Riley me observó perplejo a mi reacción.
Si, no actuaba de esta forma con nadie. No era normal ver a Maggie gritarle a las personas. Pero debo admitir que desde la pelea que tuve con Alexx, mis ganas por sobrellevar personas eran pocas.
Además de que influyen muchos factores que detesto.La rubia me miró anonada, con apuro se levantó del sofá y recogió sus cosas.
Riley seguió en boxers intentando ayudar a la chica a recoger su ropa y disculpandose una y otra vez por el momento, incluso le dió dinero para que tomara un taxi y se fuera.
—Oye, ¿qué te sucede? Le hablaste muy feo a Kindra.—se quejó una vez cerró la puerta y su amiga se fue.
—Oh perdon, ¿debo ir a lavarle los pies a tu invitada sorpresa mientras veo como se revuelcan en mi sofá sin mi permiso?
La expresión de Riley fue divertida, fresca y natural. Entornó sus ojos liberando una sonrisa ladina.
—¿Me hubieras dado el permiso de tener sexo en tu apartamento?
—Por supuesto que no.
El chico semi desnudo gira los ojos en respuesta.
—¿No tienes suficiente espacio en tu apartamento como para que invadas el mio con tus amigas?
Riley se encoge de hombros.
—Alexx me pidió buscar un hogar temporal. En su idioma eso significa que me pierda toda la noche porque pasará tiempo a solas contigo.—bufó con desinteresMi rostro se desencaja totalmente cuando Riley pone a Alexx en la conversación. Las cosas hubiesen sido muy diferentes si Alexx no me hubiese ocultado sobre Brigg.
Tan diferentes que estariamos muy entretenidos en nuestras bocas.
—¿Tenías que divertirte en mi sofá?—reproché con asco.
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Después del verano
JugendliteraturSEGUNDO LIBRO DE LA SERIE #VERANO Maggie y Alexx en la universidad experimentan lo que es el amor, la privacidad y la libertad lejos de casa. Pero una persona se interpondrá a toda costa para que su relacion acabe de una vez por todas. El primer a...