Minatozaki Sana escapa exitosamente de Japón luego de que el rey de este país la descubra con su hija.
Ella decide escaparse a Corea del Sur donde estaría más segura, además ese país era reconocido por tratar a todos sus habitantes tanto extranjeros...
ㅡDe verdad Dubu, lo estoy intentando ¡Pero es imposible! ㅡDije totalmente frustrada.
Veía la diana de la princesa Zhou y el centro estaba prácticamente que se partía por todas las flechas que habían caído ahí. Sin embargo mi diana parecía, hasta nueva... Eso sí, el suelo estaba lleno de flechas, algunas incluso estaban rotas.
Podía sentir el sudor en mi frente y mi respiracion era irregular.
ㅡTome princesa Minatozaki ㅡDijo Dahyun alcanzandome un recipiente con agua.
Yo la mire extrañada por su actitud, pero al girarme vi como Zhou caminaba hacia nuestra dirección.
Me bebí toda el agua de un sorbo y me paré de mi lugar, limpie un poco la parte trasera de mi pantalón y puse mi espalda recta "como una princesa".
ㅡ¿Como vas Minatozaki? ㅡPregunto la de piel canela mientras se frenaba a mi lado.
Yo abrí mis ojos ante la falta del "princesa", pero aún así no se lo reclame, ya que al fin y al cabo yo no era una princesa.
Mierda no soy una princesa, pensé cerrando los ojos y suspirando.
Esta bien, gracias al viejo podría fingir que lo era, ¿Pero hasta cuando duraría está farsa? Supuse que una vez me vaya de este castillo, ya no tendré a donde ir.
Porque el maldito rey de Japón debe de acordarse de mi. Aunque no se acuerda ni de los hijos de su arem... Myoui Mina, ese nombre llegó a mi mente como un balde de agua fría. ¿Qué ocurriría si ella llegará a aparecer? No no no, imposible, si ella aparece por el reino de Japón la matan. Al fin y al cabo ser homosexual todavía es un delito allí... Joohyun... Ella seguro mintió diciendo que la obligue a besarme...
¡Ahora todo tiene jodido sentido!
ㅡ¡Minatozaki Sana! ㅡGrito Tzuyu en mi oído a lo que yo salte por el susto.
ㅡP-perdón estaba distraída ㅡMurmure sacudiendo mi cabeza para dejar de pensar en eso un momento.
ㅡDe eso me di cuenta, ya están trayendo las espadas y escudos para entrenar... Son de madera y no estan afiladas, así que quita esa cara de espanto ㅡDijo lo último con un ligero tono burlón.
Yo sonreí por su intento de aligerar el ambienteㅡGracias ㅡAgradecí.
ㅡ¿Oh cuantas flechas dio en el centro? ㅡPregunto al darse la vuelta y ver mi espacio de tiro.
ㅡDi cero flechas, use veinte y se rompieron cuatro ㅡInforme como si de una lista se tratara.
ㅡWow, nunca vi a alguien que fallará tantas flechas ㅡDijo sorprendida pero al instante sacudió su cabezaㅡLo siento princesa Minatozaki ㅡMurmuró haciendo una pequeña reverencia.
ㅡNo pasa nada Zhou, por lo menos soy buena haciendo negocios ㅡDije pasando uno de mis brazos por sus hombros y atrayendola hacia mi.
ㅡClaro, como la compra de esos pollos "dorados" ㅡHabló con gracia y yo solté una pequeña risa.
Parecíamos dos personas normales, bromeando sin miedo a que nos miren mal por ser "poco educados", y nos abrazabamos sin mantener el "espacio personal".
ㅡPrincesa Zhou y Minatozaki, ya están preparadas las espadas, y la Sra. Kang las está esperando para comenzar la charla de precauciones ㅡInformó un caballero mientras desviaba la vista.
ㅡOh, claro ㅡDije soltando a ZhouㅡGracias ㅡMurmure y salí prácticamente corriendo para sentarme al lado de Dahyun... Aunque la princesa Hirai ya había ganado mi lugar así que no me quedo otra que sentarme al otro lado.
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POV. Zhou Tzuyu
ㅡChristopher, no dejes que Im Nayeon se acerqué a mis aposentos ㅡMurmure al soldado que cuidaba una de las esquinas.
ㅡ¿Y si ella insiste? Yo no podré detenerla princesa... ㅡDijo él girando su cabeza a donde yo estaba.
ㅡDile que no estoy en mis aposentos y que nadie puede entrar ㅡDije y nisiquiera esperé a que respondiera.
Estaba demasiado cansada, el día había terminado y prácticamente no sentía mis manos.
Apenas tuve mi cama en frente suspire con cansancioㅡAl fiiin ㅡMurmure tirando mi cuerpo sobre el comodo colchón.
Pero me vi interrumpida al sentir un peso sobre mi, al principio me asusté, pero luego escuché las risas de Nako y me levanté para verla.
ㅡHey, ¿Cómo te fue con Gertrudis hoy? ㅡLe pregunté mientras me estiraba, haciendo que mi espalda suene.
ㅡBien, me dejó probar un poco de la masa de chocolate y puff estaba riquísima ㅡDijo llevándose las manos a la caraㅡ¿Y a ustedes como les fue? ㅡPregunto sentándose en mi cama.
ㅡNos fue bastante bien, aunque la princesa Minatozaki se lastimó uno de sus dedos con la espada ㅡDije lo último con un poco de tristeza.
Una astilla enorme se había metido en su dedo índice y por intentar sacarla rápido, termine por hacer más grande la herida... A pesar del daño que le hice ella sonrió evitando que me sienta mal.
ㅡ¿Ella está bien? No le cortaran el dedo ¿no? ㅡPregunto asustada, exagerando como de costumbre.
ㅡTranquila Nako, sólo deberá de usar una venda por un día ㅡDije soltando una pequeña risa.
Ella dejó de hablar y por esa simple acción supuse que quería preguntarme algo, pero no se animaba a hacerlo.
ㅡSueltalo ㅡPedí mientras me dirigía a mi armario, para poder ponerme la pijama.
ㅡ¿Podemos ir a sus aposentos? ㅡPregunto una vez volví.
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