❥ ┊ ੈ ❛ 𝑺𝒊𝒆𝒕𝒆 𝒅𝒊𝒂𝒔 𝒔𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒇𝒊𝒄𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆𝒔 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒆𝒏𝒂𝒎𝒐𝒓𝒂𝒓𝒎𝒆 ❜ ೄ ☾
Wang Yibo es un popular alumno de primer grado conocido por salir cada semana con una chica distinta. Dirá que si a la primer persona que se...
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Yibo decidió no faltar a las clases complementarias del club porque Xiao Zhan probablemente terminaría regalándolo si lo hacía. Mientras camina para salir de la institución al haber desperdiciando un sábado observa con detenimiento la pantalla de su celular en espera de algún mensaje de Xiao Zhan.
—¡Hey, Yibo! ¿qué te pareció el entrenamiento? —una adolescente (que Yibo no recuerda haber visto antes) adelanta su caminar solo para avanzar junto a Wang Yibo. No le deja contestar solo sigue hablando: —Esta semana no has faltado ni una sola vez, ¡estoy muy sorprendida!
—Van a reprocharme si falto —responde Yibo sin apartar la mirada de la pantalla.
La joven cambia su modo de andar por uno mucho más infantil y comenta: —¿Es así?, ¿quién, el profesor? ¡Bueno, eso no importa! Yo venía a pedirte que vayamos a almorzar juntos.
El castaño aprieta sus labios y aumenta la velocidad de sus paso después de responder: —Tengo planes.
—Supongo que vas con tu misteriosa pareja semanal, ¡ah, no hay nada más que hacer! Lo volveré a intentar pasado mañana lun...
Ella se ve interrumpida por el sonido de una llamada. Observa como la pantalla del celular ajeno se ilumina junto con el atractivo rostro juvenil, como si la llamada se tratara de algo que ha estado anhelando. Tal vez es la supuesta novia semanal de la que nadie tiene datos y que se ha vuelto un misterio. Yibo no pide disculpas o permiso para atender la llamada puesto que lo que pase con la joven a su lado poco le importa.
—¿Dónde estás? —pregunta la voz de Zhan al otro lado de la línea. Yibo no sabe si es producto de su ilusionada mente o si realmente la voz de Xiao Zhan se escucha doble.
La joven se acerca un poco más, lamentándose de ser tan entromentida poco después al ver que Yibo se aleja . Pero no se rinde y continúa caminando en la misma dirección.
—Voy de salida —dice el menor en respuesta, cambiando su dirección para ir en dirección a la casa de Xiao Zhan.
Para su sorpresa Xiao Zhan ya está ahí, recargado en uno de los muros (el mismo muro donde el mayor le pidió que salieran) con celular en mano. Los labios de Zhan muestran una cálida sonrisa en su dirección mientras termina la llamada y se acerca a Yibo.
—Me pareció escuchar tu voz, Bo-di. No tenía nada que hacer en casa, así que vine —comenta Xiao Zhan.
Desde el incidente del día anterior el azabache había estado comportándose de una forma bastante extraña, intentando poner un poco de límites entre él y el castaño. Pero también ha sido él quien llamó a Yibo por eso de las 8 de la noche para acordar salir juntos.
La chica sale corriendo a un lado de Xiao Zhan, aliviada de no haber visto ninguna novia. Bueno, para ella (y para la gran mayoría) ni en mil años Xiao Zhan y Wang Yibo serían una pareja. Emocionada enreda sus brazos alrededor del brazo derecho de Xiao Zhan.