Se había vuelto inseparable de aquel hombre, que aún la veía como como una niña, una niña que tenía que ser protegida, y mimada con cuántos regalos y detalles fuera posible. Una niña que se había puesto como su primera prioridad...o su primer deseo...
Mi cabeza punzabá al igual que mis ojos, había llorando toda la noche por el amor de un hombre otra vez, acaso con Susuke no había tenido más que suficiente! En este instante al único que no quería era con el que tenía que pasar todo el día a su lado.
-Sakura por favor hablemos- dijo Kakashi apenas tuvo la oportunidad, siempre había alguien presente, Gaara, Temari, Shikamaru, que le impedía hablar abiertamente con ella. -No tenemos que hablar nada a menos de que sea un asunto del trabajo- dijo Sakura alejándose todo lo que podía y le permitía la oficina de Gaara. -¿Sakura, enserio que te vas comportar así conmigo?- indagó y lo único que recibió fue una mirada llena de irá y odio acumulado en su interior, para fortuna de la pelirrosa Gaara regresaba con el ahora jefe de seguridad de Suna para arreglar más tratados.
El sol por fin se ponía en Suna, pero el calor seguía siendo igual de intenso.
-Mira frente, ¿Acoso no es hermoso?- dijo Ino mientras se observaba en el espejo de su habitación, usaba un vestido morado, era largo y con pedrería por todo el corset, tenía un corte a lo largo que dejaba a la vista una de sus torneadas piernas a la par de unos tacones negros abiertos de la punta- A Sai le gusta el morado, aparte me queda como anillo al dedo.
Sakura observaba los vestidos que Ino había tendido sobre la cama, Sakura no se equivocaba, Ino traía 4 vestidos formales, uno morado, el que estaba usando en ese momento además de un verde, negro y rojo.
-Ves frente, nunca sabes cuándo necesitaras un vestido formal, anda ponte uno, que ya es tarde- dijo la rubia colocándose unos pendientes brillantes.
A regañadientes Sakura tomo el vestido negro, a diferencia del de su amiga, este era corto con un profundo escote en la espalda que llegaba hasta la cadera, con unos finos tirantes que destacaban en sus hombros, el negro contrastaba con su tono de piel, se pasó los dedos por el cabello y quitó hitai-ate poniéndolo de lado en el tocador, y dió unos toques más dejando un look despedido pero provocativo, corrió al otro lado de la habitación y tomo unos tacones cerrados de Ino igual negros, aquella mujer traía más zapatos que armas posiblemente, y se miro un momento en el espejo se veía bien y suspiro, Gaara había menos preciado su "cena", pues en la tarde grandes mandatos llegaban como Kage's y sus respectivos acompañantes, de una cena de 7 había pasado a una de 50 personas, le sonrió una última vez a Ino, ella ni se imaginaba que su corazón estaba sufriendo y abrió la puerta, Sai ya las esperaba y permitió que cada mujer se colocara a sus costados para que ellas tomarán sus brazos y caminarán hasta el salón donde ya aguardaban varios invitados y más seguían llegando.
-Sakura, te ves hermosa- una voz profunda le dijo a sus espaldas, y sonrió donde fuera reconocía esa voz, y en lo que llevaba de sus estancia no lo había visto. -Kankuro!- dijo la pelirrosa soltando el brazo de Sai y caminando hasta el, que vestía de pies a cabeza de negro, con las líneas moradas en su rostro, y se mordió el labio, su castaño cabello lo hacía ver demasiado apuesto. -Apenas llegué hace unas 2 horas, estaba en una misión, no sabía que estarías aquí- y llevo su mano a la espalda desnuda de la pelirrosa.
La pelirrosa acepto su toque sin problema, no era la primera vez que lo hacía, y se rio para sus adentros, aún recordaba el día en el que Kankuro la había besado, y dejado casi desnuda hasta que lo detuvo ambos tenían las respiraciones agitadas y ella estaba en braguitas pero se sentía tan insegura en aquel momento aún tenían sentimientos por Susuke que le impedían entregarse a otro hombre, Kankuro aceptó, era todo un caballero que solo pidió a cambio un beso de despedida antes de irse, de ahí cada vez que el visitaba la aldea le robaba besos y caricias íntimas a la pelirrosa, pero ya tenía más de 2 años que no visitaba la aldea.
-Asi que el Hokage- rio Kankuro a mi oído, ya había pasado más de 2 horas de la cena y nos encontrábamos bailando lento en la pista de baile, y yo lo abrazaba del cuello, las manos de el acariciaban mi espalda. -¿De que hablas? -Desde que llegó no te quita la mirada de encima -Tal vez necesita algo de su asistente, si te lo dije, cuando Shikamaru se vino de vacaciones a Suna, me ví en la obligación de tomar su puesto- sugería retrancando mi mejilla contra su pecho, no le pensaba decir que el idiota del Hokage me había obligado. -La mirada que el tiene la conozco, recuerda también soy hombre y sin duda te he visto a ti y más mujeres con la misma mirada de querer llevarlas a cama y folllarlas hasta el amanecer- dijo plantando un beso húmedo en el hombro descubierto de la pelirrosa -Te equivocas... -Entonces vamos, terminemos lo que tenemos pendiente- dijo y la saco del salón subiendo ambos rápidamente las escaleras hasta la habitación de ella.
-Kan..ku..ah!- gemi al sentir sus labios contra mi cuello en dónde chupaba con fuerza, mis piernas se enroscaban en las caderas de el, permitiendo ese roce continuo contra su erección creciente. Las manos de el eran rápidas, y en un abrir y cerrar de ojos nuevamente estaba solo en bragas bajo su mirada tendida sobre la cama, Kankuro con los años había adquirido la misma fama de Genma solo que el en Suna.
Kankuro detuvo a chupar y lamer los pezones endurecidos de su amante de cabellera rosada, haciendo la repetir "Si, Kankuro si" cualquier cosa lo valía con tal de escucharla gemir su nombre.
Comenzó a frotar sus dedos contra las bragas húmedas de la pelirrosa mientras le comía los labios callando sus gemidos, tenía tantas ganas de arrancarle las bragas pero se constuvo y la observo arquesrse con fuerza contra sus manos y dejo que el orgasmo la invadirá en su totalidad.
El aún vestía todas sus prendas y sonrió victorioso, estába sonrojada, despeinada y con chupetones por todo su cuerpo.
Y se dió la vuelta para alejarse de ella.
-¿Kankuro a dónde vas? -Cariño creo que nuevamente no es nuestro momento- y salió de la habitación dejando a una pelirrosa confundida pero exhausta del orgasmo que el castaño le había propinado.
En el pasillo Kankuro hablo en voz alta -¿Si la escuchaste? ¿Escuchaste mi nombre salir de sus labios pidiéndome más? No sabes lo deliciosa que sabe- dijo Kankuro para meter sus dedos en su boca- Exquisita!
Kakashi lo escuchaba en las sombras oculto.
Holaaa! Capitulo porque por fin ya terminó mi semestre!! Creo que ya pronto se acerca el final de esta historia😱 Y comienza una nueva!!!
Dejen sus comentarios y votos 💙💙 Les dejo una imagen del hermoso Kankuro 🤤
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