I'm a Riddle; Draco Malfoy |Traducción|

Siete

Este capítulo contiene escenas violentas, léase con precaución

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Blaise se obliga a levantarse del suelo con un movimiento rápido antes de dar pasos apresurados detrás de Draco.

Se detiene unos segundos en la puerta; dándome una tierna sonrisa antes de seguir corriendo tras él.

Siento las lágrimas ardiendo en mis ojos. Draco nunca me miró así antes. Nunca permite que yo ni nadie más lo vea herido; Siempre; Y ahora, por un breve momento; Él hizo; Y lo lastimé; Mierda.

Salgo a trompicones por el pasillo, corriendo escaleras abajo, escuchando a los dos mejores amigos rugiendo y maldiciéndose el uno al otro en la sala común vacía.

Trago saliva cuando mis ojos se encuentran con ellos, Draco sostiene a Blaise por el cuello, tirándolo con fuerza hacia un sofá, volviendo a dar un paso hacia él mientras sus manos vuelan hasta su cuello, apretándolo con fuerza.

-¡Draco, por favor!. -Le suplico, tropezando hacia ellos cuando noto que Blaise está luchando por respirar.

Entro en pánico, tratando de empujar a Draco lejos de él, golpeando su brazo repetidamente.

-¡Detente, lo vas a matar! ¡Draco!. -Grito, pero él no se mueve. Ni siquiera me mira. Sus ojos se clavan en los de Blaise mientras la rabia estalla en él. -¡Draco, detente!. -Blaise respira mientras sus manos lo agarran a Draco, tratando de apartar sus manos.

Pero eso no es posible, no cuando está tan enojado. Nada puede detenerlo cuando es tan feroz. Pero no me detendré. Sigo empujándolo, golpeando su brazo, suplicándole que me deje Blaise, vaya.

-¡Draco, no pasó nada!. -Grito y Draco deja de respirar.

Las respiraciones masivas y furiosas que acaba de tomar ahora están silenciadas. Una de sus manos está volando hasta mi barbilla, agarrándola con brusquedad, y sin siquiera mirarme, me obliga a retroceder, lo que me hace tropezar, cayendo sobre la mesa de vidrio junto al sofá.

El vidrio está roto por todas partes, especialmente en mí. Trato de levantarme, solo para sentir el vidrio cortando mis doloridas palmas.

Gimo de dolor, y por el sonido de mis suaves aullidos, Draco logra romper su trance de rabia. Sus ojos se abren cuando ve mi cuerpo tendido en el cristal roto, con arañazos por todas partes.

-Joder. -Maldice, empujando a Blaise de nuevo al sofá mientras da un paso hacia mí, arrodillándose a mi lado mientras aspiro a contener mis lágrimas.

El escozor del vidrio astillado en casi todas partes es abrumador. No me atrevo a hacerlo. hacer cualquier cosa, sin atreverse a respirar, sin atreverse a moverse. Temiendo que haga más daño que bien, miro a mi alrededor, buscando mi varita, pero no puedo verla por ningún lado.

Sus manos frías se envuelven debajo de mi espalda y rodillas antes de levantarme, llevándome hacia las escaleras. Pero antes de dar un paso por las escaleras, se vuelve hacia Blaise, que está sentado en el sofá con la cabeza enterrada entre las manos, respirando con dificultad, tratando de recuperar el aliento que Draco casi le quita.

-No hemos terminado de hablar de esto. -Murmura Draco antes de darse la vuelta conmigo todavía en sus brazos, llevándome escaleras arriba.