Play With Fire

CAPITULO CINCO: "LAS INQUIETUDES SE APROXIMAN"

Al abrir los ojos estaba con muchos adolescentes, mujeres y hombres vestidos con lencería, preparándose para el trabajo, entendiendo en donde estaba: en un prostíbulo de mierda.

 Pero no estaba solo, mi amigo Ciel estaba conmigo, estaba a mi lado, nervioso y asustado, yo estaba peor, pero cuando fue nuestro turno, estábamos en un cuarto con un dos viejos gordos mayores de aproximadamente de cuarenta años, no quería ver, solo quería que hicieran lo suyo y se fueran, pero me equivoque, Ciel golpeo a unos de los clientes, molestos, nos llevaron hacia el patrón jalando de nuestros cabellos, creí que ya se había terminado, después de que termino de golpearnos con el látigo en nuestras piernas,  no le basto:

-Eres un pedazo de mierda Ciel, ¿Creíste que no me daría cuenta?,  tu amiguita me confeso que nunca te cogieron, al igual que tu, Yoongi, así que...

Sin pensarlo, acostó a Ciel en la cama con brusquedad, quitándole toda la lencería puesta, y penetrando a Ciel sin preparación y sin piedad, el se mordía sangrando del dolor, mientras a mi me obligaba a verlo como sufría, había desviado la mirada, escuche el grito de Ciel, que cuando salió del interior de mi amigo, se paro jalándome mis cabellos

-¡Si vuelven hacer de sus estupideces...no les daré de comer por 3 semanas!

Pero cuando iba a responderle, me asuste mucho, al ver una imagen horrible: Ciel tenia las piernas abiertas, pero en su entrada, donde fue penetrado estaba sangrando, escuche sus palabras con un tono de tristeza y sin vida:

-Lo siento...mucho...no volverá...a...pas-

Ciel había cerrado los ojos, mientras yo le llamaba por su nombre, el seguía sin abrir los ojos

-¡No creas que me olvide de ti...maldita puta de mierda!

-No...no...no me hagas nada...no, no...¡AH!

Me levante de un brinco otra vez, estaba completamente asustado, aterrado, me di la vuelta, en mi mente solo venían esas horribles imágenes, trataba de conciliar el sueño abrazando con fuerza el oso de peluche que me dio Jungkook, era imposible, que desesperado me puse a hacer mi rutina de ejercicios,  estaba sudando a mares, que decidí darme una ducha, antes de que llegara a la cocina para ir al baño, me di cuenta que todos estaban dormidos, cuando iba a abrir la puerta del baño, me dio una tremenda sed, que me regrese a la cocina, había tomado cuatro vasos de agua, aun así la maldita sed no se me quitaba, abrí el refrigerador tomando 3 cubos de hielo e ingresarlos a mi bebida, pero estaba dudando si tomarme el agua o no, había sudado y si me tomaba el agua completamente fría me enfermaría

-Nah a la mierda si me enfermo, total es mi vida, el que se va enfermar soy yo.

empecé a beber mi bebida, no sin antes de cerrar el refrigerador, no me esperaba lo que vi: al lado de la puerta me tope con Jungkook, tanto fue la impresión, que escupí el agua sobre el dejando caer vaso de plástico, ahogándome  y para evitar caerme había jalado algo, que no me di cuenta que fue, cayendo al suelo

-Mier-da esta helada, Yoongi ¿estas bien?  

Yo solo asentí diciendo que si, trataba de recuperar el aliento, mientras de preguntaba ¿en que momento se había levantado de la cama? no quería saberlo, cuando me recupere, me senté en el suelo, note que en mi mano derecha tenia una toalla de baño, confuso mire al frente, ¡por la grandísima puta madre! Jungkook estaba completamente desnudo frente a mi, sin evitarlo lo vi todo, sus abdominales están muy bien marcados, esos pectorales y ese paquete que tiene ¡Dios es enorme! por fin me di cuenta que era la toalla de baño de Jungkook, sonrojado le lance la toalla, mientras cubrí mi rostro con el cuello de mi playera negra