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-Hugo tranquilo que vas a tener mucho tiempo para jugar -Íbamos andando por la acera camino al parque, cuando me desperté de la siesta, la película ya había terminado y Hugo seguía dormido sobre mí al igual que Mimi solo que esta última estaba debajo de mi.Los desperté y Hugo nos pidió ir al parque, Mimi me aseguró que a ella no la importaba acompañarnos y tras ponerle a Hugo una ropa más cómoda allí estábamos.
-Mami porfi vamos más rápido.-Hugo tiraba de mi mano hacia abajo,para que camináramos más rápido
-Hugo que ya llegamos, no te preocupes.-El pequeño se quedó satisfecho con esa respuesta,porque no dijo nada más sobre eso en el resto del camino.
-Mimi,de verdad que no hace falta que vengas, puede que tengas otros planes-Mimi caminaba a mi lado,y mantenía la mirada fija al frente.
-Que no jo, que me hace mucha ilu ir con vosotros al parque.-Giró la cabeza para mirame sonriente,a lo que yo sonreí también.
Seguimos andando en un silencio cómodo,solo interrumpido por algunos comentarios de Hugo,andábamos muy juntas,y casi sin darme cuenta,entrelacé su mano con la mía,tardó en reaccionar,pero cuando lo hizo,apretó un poco más el agarre,bajó la mirada a nuestras manos y la subió a mis ojos,sonriéndome con los ojos brillantes,yo la sonreí de vuelta.
Llegamos al parque de los niños pequeños,y Hugo corrió hacia el arenero,Mimi y yo,sin embargo,nos sentamos en el banco más cercano.
-Bueno Mimi,creo que tengo varias cosas que explicarte
-Miri, no hace falta que me cuentes nada si no te sientes preparada.-Mimi posó una de sus manos sobre mi muslo, para transmitirme seguridad.
-No, creo que mereces saber mi historia-La miré a los ojos y ella asintió para que empezara a contárselo.
-Yo empecé la carrera en Vigo, me fui a vivir con mi hermano y su novia, que vivían allí, iba genial con la carrera, sacaba las mejores notas de mi clase, pero cuando llevaba un curso y medio, me fui de viaje a Inglaterra con mi grupo de amigos de la uni, estuvimos cuatro días allí, había un chico en el hotel con el que estuve tonteando desde el día que llegué , al final, el último día terminamos acostándonos , no volví a saber nada de él, se puede decir que no me acordaba ni de su existencia, hasta que un mes y medio después, me enteré de que estaba embarazada.-Bajé la cabeza avergonzada.
-Por suerte, mi familia siempre estuvo a mi lado, cuando me enteré, decidí que lo mejor era dejar la carrera y buscar un empleo para darle una buena vida, pero mis padres se negaron, y gracias a ellos, a mi hermano y su novia , pude terminarla.-Me quedé en silencio, empecé a jugar con mis anillos, y las lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas.
-Jo Miri, eres increíble.-Mimi me acercó a su pecho abrazándome.
-¿por qué?-Metí mi cabeza en el hueco de su cuello.
-No se, admiro cómo con 23 años has sido capaz de llegar aquí después de lo que pasó, yo no sé qué habría hecho.
-No habría sido capaz si no hubiera tenido a mi familia siempre a mi lado.
-Sí Miriam,pero lo tuyo es de admirar, Tienes mucha suerte Miri y el peque también tiene mucha suerte de tenerte.
-Joe Mimi-Me apreté más contra su pecho, al final el rato de parque se nos pasó muy rápido, ella también me contó cosas sobre su familia y su pueblo, cómo con tan solo dieciocho años fue capaz de alejarse de su familia yéndose a Madrid y tiempo después a China, para poder trabajar de lo que le gustaba.