VI

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-Espera aquí un segundo-Dejé a Mimi en la entrada y fui hasta el salón donde María estaba sentada con el móvil.

-Hola María,ya te puedes ir,he traído una amiga,lo digo para que no te pille por sorpresa si la ves por ahí-Se levantó del sofá para recoger sus cosas y no tardé mucho en escuchar la puerta de la casa cerrarse.

Volví a la entrada para buscar a Mimi que me miró preguntándome quién era esa chica,yo negué diciendo que ahora se lo explicaba,la llevé hasta el salón y la hice sentarse en el sofá, me abracé a ella un poco temblorosa por los nervios,me agarró por los hombros mirándome a los ojos, y me separó de su pecho para mirarme a los ojos.

-¿Miriam,estás bien?-Yo asentí.

-Si si tranquila,espera aquí un segundo,que tengo que contarte una cosa importante.-Ella asintió soltando su agarre.

Caminé hasta la habitación de Hugo,al abrir la puerta me lo encontré medio dormido sobre su cama frotándose los ojitos con la manga de su pijama.

-Hola pollito¿te he despertado?-Hugo asintió despacio aún medio dormido.

Me agaché a la altura de su cama y abrí los brazos,Hugo se abrazó a mí rodeándome el cuello con los brazos,apoyó la cabeza sobre mi hombro y yo le di un beso en la frente,despacio,caminé hasta el salón acariciando la espalda del pequeño,me paré delante de la puerta y respiré hondo antes de entrar.

En cuanto escuchó el movimiento,Mimi me miró, su rostro expresaba confusión,me acerqué hasta ella.

-Mimi,este es Hugo-Hugo separó un poco la cabeza de mi hombro.

-Mira pollito,esta es mi amiga Mimi.-Me senté en el sofá al lado de Mimi.

-Que guapo eres Hugo, y qué pijama más chulo.-Mimi alargó la mano hasta la cabecita de Hugo acariciando sus rizos.

-Gracias-Hugo volvió a frotarse los ojos apoyando de nuevo la cabeza,lo que significaba que se iba a dormir de nuevo,Mimi sonrió enternecida.

-Voy a acostarle-Susurré acariciando la espalda del pequeño que ya se había dormido de nuevo y Mimi asintió.Fui de nuevo hasta su habitación y tras arropar al pequeño y darle un beso de buenas noches,volví hasta el salón,ahora venía la parte más difícil,hablar con Mimi.

-¿Quién es?-Llegué al salón y Mimi me miró interrogante,me senté a su lado,nuestras piernas se rozaron y ella no tardó en apoyar su mano en uno de mis muslos al ver mi nerviosismo.

-A ver,no sé cómo decirte esto pero,es......,es mi hijo-Mimi me miró sorprendida para después sonreír,aunque su sonrisa no duró mucho ya que se puso seria y se tensó al instante.

-¿qué pasa?-esta vez fui yo la que me tensé al instante,pensado que era algo malo.

-¿tienes.........,tienes novio?-Yo negué efusivamente.

-No no no,estoy soltera-Mimi se destensó y volvió a sonreír.

-Es guapísimo,se ve que ha salido a su madre-Solté una carcajada,pensaba que se lo tomaría peor,me abracé a ella recostandome en su pecho.

-¿Quieres quedarte a dormir?-puse un puchero esperando a su respuesta.

-Me encantaría-yo sonreí.

Caminé con ella hasta la habitación,me encantó que no me hubiera preguntado,y que hubiera respetado mi espacio, fui hasta el armario en busca de un pijama para ella,saqué uno del armario y se lo lancé a Mimi en la cabeza,que estaba sentada sobre mi cama,empecé a reírme al ver el puchero que hizo Mimi como si estuviera enfadada,se levantó de la cama para después empezar a perseguirme por toda la habitación,al final,terminó empujándome sobre la cama para después atacar a mis costados sin piedad,haciéndome cosquillas,cuando paró,nos quedamos con las caras muy juntas,solo nos separaban un par de centímetros,la miré a los ojos y luego bajé la vista a sus labios,se lanzó a mi boca y comenzó a besarme con intensidad,cada vez más,pero decidí que era mejor pararlo para que no fuera a más,se levantó para ponerse el pijama,y yo no tardé en hacer lo mismo.

Ya encontré el camino y despertéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora