"Hermana de tres YouTubers (Vegetta, sTaXx y Tú)" [EDITANDO]

Capítulo catorce.

.-Vi tu pelea con Vegetta.- dijo Michelle seria cambiando de tema.

-¿Qué quieres que te diga?- dije seria.

-Te gusta.- dijo segura.- ¿Verdad?

-Ehh…- vacilé.

-Venga, te aseguro que puedes confiar en mí.- dijo acariciándome el hombro.

-Si.- afirmé.

-Oww.- dijo pellizcándome los cachetes.- Que monada.- dijo y me soltó.

-Vale.- dije acariciándome los cachetes.

-¿Cuál es el problema?- preguntó.

-Primero me ilusionó y nada más que me valla porque me atropellaron y él se va con otra tía.- dije recordando nuestra pelea.

-Y ya no lo quieres ver más.- dijo analizando todo.- _____.- dijo tomándome las manos.- Ignorar a alguien no lo hace desaparecer.- dijo negando con la cabeza.

-Pero si me hace olvidar.- dije.

-Quizás.- dijo.- Pero tienes que superarlo como ya una adulta, no eres una chavala de 12 años ya, creciste.- dijo levantando las cejas.

-Vale.- dije.- ¿Qué quieres que haga?- pregunté.

-Nada, solo sigue con tu vida normal, y si te habla, háblale pero no como antes.- dijo.- Me ha pasado y eso los destruye.- dijo con una sonrisa cínica.

-Me caes bien muyaya.- dije asintiendo.- Gracias.- dije y la abrasé, ella me correspondió el abraso.

-Tú también a mi.- dijo.

-¿Carrera hasta donde están los chicos?- pregunté separándome con media sonrisa.

-Va.- dijo.- Uno, Dos.- empezó el conteo.

-¡Tres!- grité y corrí lo más rápido que pude.

Iba una cuadra antes de llegar pero me caí por una zancadilla de alguien.

-¡¿Qué te pasa hija de puta?!- le grité parándome, pero no la vi, vi que era mujer por que llevaba tacos.

-¿Y a esta que le pasa?- preguntó una chica saliendo de la sombra.

-Claudia.- susurré para mi misma.

-La misma.- dijo, al parecer me escuchó.

-¿Qué quieres?- le pregunté.

-Que te alejes de mi novio.- dijo acorralándome en un muro mientras ponía sus esqueléticas manos en mi cuello asfixiándome, tiene fuerza para ser tan flaca la piba esta.

-No, es mi amigo.- dije con poca fuerza, la verdad es que no lo iba a tomar en cuenta solo que me gusta llevarle la contraria a todo el mundo, especialmente putas como ella.

-¿No te vas a alejar?- preguntó con una sonrisa cínica.- ¿Ahora sí?- preguntó poniendo un cuchillo en mi cuello.

-¿¡Pero a ti que te pasa tía!?- grité al ver que sentía cada vez más presión en el cuello.

-Claudia suéltala en este mismo instante.- dijo una voz, que digo, siempre he conocido esa voz, una de las dos que me rompió el corazón.

-F-Fra-Frank.- dijo Claudia sorprendida y soltándome de una haciendo que caiga al suelo.

Rápidamente tomé una bocanada de aire y me revisé el cuello, menos mal que Frank llegó a tiempo, quizás me hubiese matado la loca esta.

-¿Por qué le hiciste eso a _____?- preguntó acercándose a mí.