Te imaginas nunca morir, nunca envejecer, una bendición. Pero que pasa cuando vez a la persona que amas morir?. Ya no es bendicion, ya es maldición, más cuando no puedes hacer algo por cambiar las cosas, eso es lo que se enfrentan rubius y Willy, ve...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
NARRADORA.
8 años, 8 años en los que rubius y Willy no tenían noticias de vegetta, incluso les habían suplicado tanto a los dioses como a los dioses oscuros, pero ninguno contestaban. Cada uno por razones distintas, má que nada unos queriendo "dar más bendiciones" y los otros evitando que más personas sufrieran eso.
Lila llevaba 8 cuidando de que karmaland no volará por los aires, hoy había sobrevolado todo karmaland y no había encontrado a la hermandad oscura. Paro en una montaña para soltar un gran bufido al aire.
-ya te cansas más rápido?
La ex-diosa se dio vuelta y vio a cierta castaña clara.
-lara! Hasta que regresas!
-losiento -se encogió de hombros- problemas en WAKANDA OASIS.
Lila vio hacia abajo de la montaña esperando ver su objetivo, su compañera se puso a su lado.
-esta por el cártel y por lo que vi, lo van a bolar por los aires.
-por que no dijiste eso primero!?!
La híbrida saco sus alas y alzó vuelo mientras presionaba su brazalete y su traje se ponía.
-que no viste que llevo buscándolos toda la mañana?!
La contra le siguió a la par volando de espaldas,paso sus brazos por detrás de su cuello.
- no me preguntaste.
Lila la vio con cara de boba o ke? - no sé si tú o yo somos 2 de IQ, o solo eres tú -logro sacarle una carcajada a su amiga- ya ponte el traje.
Lara obedeció y presiono su brazalete. Se acercaban al cartel.
En París.
Cierta chica caminaba por el bosque, mientras en los árboles se miraban unas siluetas, camino hacia un arbusto y de este saco por el cuello de la remera a un chico de cabellos castaños y ojos azules.
-te encontré Tom.
El mencionado bufó para luego esbozar una sonrisa.
-cariño ahora!
De entre los árboles salto reny, Melanie sonrió y soltó al chico para luego movió su pierna hacia atrás de su espalda dándole una patada en la cara a la diosa que cayó al piso.
- a mis tórtolos favoritos encontré -vio al rededor- solo me falta uno -sonrio y empezó a caminar- ¿Dónde estará samu?
Mientras caminaba por un camino de árboles, en una rama alta estaba el niño, ya con 8 años. Melanie ya lo había visto, pero le gustaba ver cada jugareta de aquella hada.
