1 cumpleaños, 1 pastel y 1 nota [Y. JEONGIN, AU]

XXI

Cuando Hyowon se despertó, y comprobó que todo lo que vivió la noche anterior no fue un sueño, se sintió maravilloso. Eso, agregándole a Jeongin con su cuerpo mirando al techo, y sus ojitos cerrados indicando que seguía durmiendo, le sirvieron para que su corazón se sintiera llenito. Se veía como un bebé.

A pesar de que intentó ser precavida para no despertarlo, el chico terminó abriendo sus ojos apenas se movió para poner un pie fuera de la cama. Aún medio dormido, Hyowon le ofreció desayuno, y cuando ya estaba vestida y ya había preparado todo, al volver se encontró con el chico nuevamente durmiendo.

"Jeongin..." Murmura ella, y toca su rostro. El chico se mueve un poco, quejándose "Te dejé el desayuno"

"¿No vas a comer conmigo?" Replica el otro, con voz rasposa por recién levantarse.

"Ya me tengo que ir"

"Noooooo"

El chico la toma de la muñeca, acercándola a él. Hyowon suelta una risita, viendo al chico, aún con ojos cerrados, abultar sus labios para que le dé un beso.

Hyowon termina haciéndolo, viendo la sonrisa plantarse en los labios del otro. Es entonces que la deja ir.

La chica pasa lo que resta de día trabajando. Jeongin le deja un par de mensajes que ella ve en sus recesos, y al volver a su departamento, el mayor obviamente no está, pero se ve que ha dejado todo ordenado a pesar de que ella no le haya pedido nada.

Los días que siguen a ello son tiernos. Se ven un par de veces más, se mandan mensajes todos los días y, en resumen, la pasan bien. Hyowon se vuelve a sentir como aquella adolescente enamorada que sonreía cada vez que lo veía. Todo es así hasta que, unos días antes de que sea el cumpleaños de Hyunjin y el chico deba volver a Busan para celebrarlo, Hyowon recibe una carta.

E increíblemente, no es ella quien la encuentra.

"Ay, diosito... Debes ser responsable con tu correo..." Escucha a Rima regañarla, mientras las dos entran al apartamento. Se habían puesto de acuerdo para encontrarse porque su amiga debía contarle algo "No puedes amontonarlo todo allí si- Oh dios"

Lo último que ha dicho hace que se gire a mirarla. Rima tiene sus ojos abiertos y corre hacia la chica, poniendo una de las cartas sobre sus manos. Inmediatamente Hyowon puede leer "Sweet Wars - aplicación"

Se aclara la garganta, esperando que el pánico no se expanda por su cuerpo. Ni siquiera se acordaba que había aplicado para el programa. Y no sabe porqué, ahora se siente increíblemente nerviosa.