Please, don't die. (Oli y tú)

Capítulo 5.

Me desperté por culpa de la luz del sol. Abrí los ojos y no vi a Oliver. ¿Es que había sido sólo un sueño? La verdad es que tiene sentido. Es imposible que alguien como Oli se fijara en la rara del instituto. Me levanté, mojé mi cara para despertarme del todo y me quedé mirándome en el espejo. Hubiera preferido no despertar de ese sueño, seguir al lado de Oliver, estar entre sus brazos... Era todo tan real...

Me dirigí a la cocina, olía a bacon (beicon) , alguien estaba cocinando algo. Poco a poco fui asomando mi cabeza por la puerta, intentando saber la identidad del intruso. Pude ver a alguien con sólo unos pantalones de pijama cocinando el típico desayuno americano. El individuo tenía el torso todo tatuado. Espera, era...

-¿Oliver?- Pregunté.

Él se dio la vuelta y me dedicó una de sus mejores sonrisas.

- Buenos días pequeña, ¿Como has dormido? - Dijo mientras se acercaba a mi y me daba un beso en los labios. Entonces, ¡no era ningún sueño! Todo lo que recordaba del día anterior había ocurrido, nunca me había sentido tan bien como ahora.

- Buenos días, muy bien gracias - Sonreí.

Oli puso lo que estaba preparando en dos platos y los cogió.

-Te he preparado el desayuno, no tenías bacon ni huevos así que bajé a mi casa a por ellos y de paso traje unas cuantas cosas más- Dijo

-Muchísimas gracias Oli, pero verás, no tengo mucha hambre - En verdad me moría por comer algo, pero no quería por si engordaba más de lo que ya estoy.

- ____, ahora que estoy aquí para cuidarte tendrás que empezar a comer, estás muy delgada - Me miró serio.

- Mira quien fue a hablar - Dije mirándolo, él si que estaba delgado.

- Pero yo como, ____ - Dijo - Y después no lo vuelvo a hechar- Añadió mirándome a los ojos.

Yo bajé la mirada y asentí, dando a entender a Oli de que comería. Él sonrió y me besó la frente.

-Así me gusta, pequeña - Dijo mientras dejaba los platos en la mesa del comedor, me hacía un gesto con la mano para que me sentara y sonreía.

Acabamos de desayunar y recibí un mensaje en el móvil:
* De Victuuurr (Vic)*
- ¿____, donde estáis? Nos habéis dejado plantados, puta :c
*Para Victuuurr*
- JJJJ lo siento beio, Oli y yo hemos decidido no ir tampoco hoy
* De Victuuurr*
-Ya os vale, a ver que me invento yo ahora
*Para Victuuurr*
- Gracias wpo, te quiero
* De Victuuurr*
- Si si si, sólo cuando te interesa ;-; Por cierto, como fue ayer? Ya me contarás e.e
* Para Victuuurr*
-e.e cuando nos veamos te cuento, Oli está en mi ducha, con eso te lo digo todo
* De Victuuurr*
-QUE PASÓ AYER CACHO JSHDHDBDHD, EN CUANTO NOS VEAMOS YA PUEDES EMPEZAR A HABLAR.
* Para Victuuurr*
Jjjjj claro
*De Victuuurr*
-Oye hermosa, después hablamos que Doraemon casi me pilla con el móvil, adiós

Después de leer el mensaje rei por el mote que le había puesto al profesor y fui a mi habitación. Cuando estaba haciendo la cama unas manos se posaron en mi cintura y tiraban de mi. Era Oli, recién salido de la ducha. Él acercó su cuerpo el mío, apoyando su cabeza en mi hombro. Acaricié su pelo mojado y me di la vuelta para contemplarle mejor.

- Amo tus tatuajes - Dije mirando su torso desnudo y acariciando cada uno de sus tatuajes.

- Cada uno cuenta una historia- Dijo posando su mano encima de la mía - Y cubre otras - Añadió.

Supuse que se refería a las cicatrices de años atrás, lo miré y lo besé tiernamente.

-Te quiero, pequeño suicida- susurré.

- Ex-suicida- me corrigió.

Yo sonreí.

- Para que morir ahora que te he encontrado, ______ - susurró.