Capítulo 10

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Las cosas estaban andando bien en la panadería, Liam iba seguido a ayudar a su padre mientras que los chicos trabajaban cada uno en su sección, Louis haciendo pasteles, Harry atendiendo a las personas y vendiendo el pan, y Zayn estaba de cajero, a veces por las mañanas y otras por las tardes, todo dependía de su turno. Ese día el padre de Liam decidió que cerraría temprano y se iría a vacacionar en familia, después de todo, cada vez les iba mejor y cerrar el local por unos días no le haría daño a nadie por lo que mandó a hacer un par de letreros avisando su ausencia y le pidió a su gente que disminuyera su producción para vender todo e irse pronto a casa. Liam aprovechó el momento para hacer una junta con sus amigos, desde que comenzaron a trabajar que ya no salían con frecuencia y solo se veían en el trabajo, le avisó a Louis sobre el asunto para que le avisara a Jane, hace mucho que no sabía anda de ella.

-Estoy seguro que querrá ir, hace tiempo que no nos vemos los tres, será como reunir al antiguo team- dijo Louis.

-Si, será como en los viejos tiempos- sonrió.

-Este... ¿puedo invitar a Harry también? es... ya sabes... buen niño- le preguntó Louis.

-Claro, no tengo problema... invitaré a Niall también.

-Oh Niall! hace mucho que no lo veo- le sonrió -debe estar más rubio que la última vez.

-Creo que si- ambos rieron.

Liam fue a avisarle a Zayn mientras que Louis le hacía señas al rizado por la ventana que daba a la zona de empaque para que se acercara a la sección de pastelería.

-¿Pasó algo lou? ¿necesitas que te traiga alguna cosa?- preguntó desde el umbral de la puerta.

-No no, no es nada de trabajo.

-¿Entonces qué es?- lo miró extrañado.

Una parte de Harry esperaba que Louis le dijera algo acerca de lo que había pasado ese día en su casa, pero este actuaba normal y se notaba que se esforzaba en evitar el tema, así que estaba seguro de que esta vez tampoco lo hablarían. La ansiedad de saber lo que pensaba el ojiazul lo carcomía por dentro, necesitaba que le dijera algo porque su mente lo traicionaba haciéndole pensar que tal vez Louis evitaba el tema para no arruinar la amistad y eso le destrozaba el corazón.

-Hoy el jefe cerrará temprano y se irá de vacaciones con su familia, no sé si te enteraste -el rizado asintió -pero Liam se quedará acá y me propuso hacer una junta entre amigos, sé que no los conoces mucho, pero hablas con la mayoría y te llevas bien con ellos... por eso... quería saber... si quieres ir...- terminó murmurando las últimas palabras-

-Claro! ¿Dónde será?

-En la casa de Liam.

-¿Y Liam está de acuerdo en invitarme?

-Claro que si!, ya lo hablamos- le dijo alegre.

-Oh... pero no sé cómo llegar- dijo haciendo un pequeño y rápido puchero.

-Te puedo ir a buscar y... nos vamos... juntos.

-Eso estaría bien- respondió el rizado y sus mejillas comenzaron a tomar un color rojizo- voy a volver a mi lugar.

-Está bien, espérame al terminar el turno para ir a dejarte y ponernos de acuerdo en la hora y todo eso.

-¿Quieres irte conmigo igual?- preguntó Harry.

-Claro- le sonrió Louis intentando no verse nervioso.

El turno de la tarde terminó y los chicos se fueron a sus respectivas casas a avisar sobre los planes que tenían a la noche, Louis y Harry caminaron por las calles de Londres más de una vez ese día solo para que el rizado pudiera asistir a la junta con los demás. Al caer la noche se reunieron todos en la casa de Liam, desde que empezaron a trabajar que habían dejado de verse en ese lugar por respeto al padre de Liam quien era dueño del local donde trabajaban, por ende era el jefe de todos y ya no les era cómodo hacer tonteras estando él cerca. De vez en cuando solían juntarse donde Louis y este les cocinaba cosas dulces para que se dieran un gusto. 

Recuérdame, por favor [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora