16 - Hakuna Matata

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Viendo lo triste que estaba el cachorro, Pumbaa intentó animarlo.

"¿Sabes? En momentos como este mi amigo Timón siempre dice que hay que dejar tu atrasado en el pasado..."

Pero el jabalí fue interrumpido por la suricata quien agitó sus brazos en negación.

"¡No, no, no! Tonto..."

"Es decir... eh..."

"Descansa, ya se te sobrecalentó el cerebro..."

Le dijo a Pumbaa quien calló desilusionado. Timón entonces se dirigió a Simba.

"...Es: 'Siempre hay que dejar el pasado atrás...' Mira chico, pasan cosas malas y no puedes poner el remedio ¿Cierto?"

"Cierto..."

"¡FALSO! Siempre que el mundo te de la espalda, lo que tú debes hacer es darle la espalda al mundo"

"No fue lo que me enseñaron..."

Respondió triste el cachorrito recordando las lecciones de su padre de nunca escapar de los problemas. El problema es que Simba es un cachorro, y con lo joven que es, es muy influenciable, y por ende, puede cambiar muy fácilmente su manera de pensar.

"Tal vez necesites nuevas lecciones. Repite conmigo: Hakuna Matata"

"¿Qué?"

Preguntó confundido el cachorro, a lo que Pumbaa reiteró sonriendo.

"Hakuna, Matata... No te angusties"

Entonces para dejarle bien en claro al cachorro la lección, Timón comenzó a cantar.

Hakuna Matata, una forma de ser...

Entonces Pumbaa siguió la canción con gran felicidad.

Hakuna Matata ¡Nada que temer!

Los animales comenzaron a caminar hacia el gran oasis, y Simba los siguió con curiosidad.

Sin preocuparse...

Es como hay que vivir

Una vez ahí, Timón recostó al leoncito en un cómodo arbusto mientras Pumbaa lo abanicaba con una enorme hoja de palmera.

A vivir así,

Y aquí aprendí...

¡Hakuna Matata!

"¿Hakuna Matata?"

Preguntó el cachorro aún algo confundido.

"Sí, es nuestra onda"

"¿Qué onda es esa?"

"¡Nada! ¿Qué onda contigo?"

Dijo Timón y los dos animales comenzaron a reír descontroladamente mientras que Simba los miraba sin entender el chiste.

"¿Sabes qué? Esas dos palabras resolverán todos tus problemas"

"¡Es cierto! Pumbaa por ejemplo..."

Cuando un joven era él...

¡¡Cuando joven era yo!!

Cantó el jabalí totalmente desafinado, a lo que Timón respondió.

"Muy bien..."

"¡Gracias!"

Sintió que su aroma le dio mucha fama...

¡Vació la sabana! Después de comer...

Pumbaa comenzó a recordar su pasado mientras Timón lo relataba al ritmo de la música. Un jabalí más joven caminaba por los pastizales hasta un manantial pero los animales caían desmayados mientras él pasaba o simplemente por estar cerca de ellos.

EL REY LEÓN: LA NOVELADonde viven las historias. Descúbrelo ahora