-¿Estás bien?- no, no lo estaba. Momo ebria y fuera de sus cabales había dejado de hablar, pero seguía llorando solo que esta vez más calmada. La chica estaba con las demás mujeres de la casa sentada en el sofá, abrazando sus piernas buscando alguna protección, la protección que había perdido desde hace tiempo.
-Oye, mocosa- una de las gemelas se sentó al lado de ella, desde siempre fueron alejadas de la pelinegra, para ellas ella era solo una más en la lista de Shoto, solo que se equivocaron y realmente eran muy orgullosas para admitirlo -El amo te dejó esto- tomó el peluche entre sus manos para entregárselo, más calmada, la menor con sus ojos lloros aceptó aquel pequeño muñeco que le había regalado desde pequeña, se había vuelto su confidente y su compañero de sueños.
-Gracias- secó las gotas que salían de sus ojos y respirando hondo abrazó al pequeño koala -Me siento... muy dolida, Shoto dice que me ama, pero sé no es así-
-Sí lo es- interrumpió Eda
-Eda, deja que termine de hablar-
-Gracias Cat- se sentó de una forma adecuada y sin verlas empezó a jugar con el pequeño juguete -El no me ama y aprendí a no amarlo, él se me confesó hace poco, pero sé que solo le atrae mi físico porque crecí, es cierto que el cariño que me tenía cuando era una niña ha cambiado, antes me veía como una niña, como su hija y ahora que crecí veo algo distinto en sus ojos... Estoy segura que le atraigo físicamente, pero él no sabe nada de mí, dejamos de hablarnos desde hace años, si me quiere conquistar va a ser complicado, ya no soy una niña que se deja comprar por una paleta- las hermanas se miraron entre sí, no sabían qué decirle, tampoco sabían en qué momento Shoto se llegó a enamorar de ella, pero como ella decía era muy probable que haya sido por su físico.
-Déjeme preguntarle algo, señorita- la otra gemela se hizo al su lado vacío
-Critica tanto al amo Todoroki, pero ¿cómo se enamoró de él entonces si perdieron comunicación entre ustedes? – la pelinegra rio algo incrédula ante la pregunta, se notaba como la contraria era fiel a Shoto y lo defendería en lo más mínimo.
-No sabría decirte con exactitud, de pequeña lo admiraba bastante y con el tiempo esa admiración se volvió en un amor no correspondido, a pesar que me ignoraba y fingía mi inexistencia, en las noches me visitaba, solía hablarme de su día y de como se arrepentía sobre que prefirió ignorarme antes de enfrentarse a Aida... Él es un cobarde y lo ha admitido frente a mi cuando fingía estar dormida, apenas mencionó como había perdido a sus anteriores esposas por estar involucradas con su mundo y no quería que eso me pasara... Si tanto me quería proteger no debió tratarme de esa manera- tras aquella confesión se recostó contra el espaldar del mueve que compartía con las gemelas, el alcohol ya estaba bajando por lo que estaba más calmada -Hoy conocí a un chico, Cat lo vio, talvez si empiezo a salir con él podré olvidarme de Shoto- a pesar de ser una joven adulta tenía un pensamiento bastante inmaduro, era bastante obvio que esa no era la solución, incluso, sus "hermanas" refutaron ese pensamiento tan infantil diciéndole que no puede jugar con los sentimientos de una persona solo para olvidar a alguien más, no estaba mal olvidar a tu anterior amor, pero que no sea a costa de alguien más el cual podría salir herido al enterarse que solo era una herramienta para olvidar a una persona de su pasado.
Momo lo había entendido, su inmadurez y el alcohol no la dejaban pensar bien, necesitaba descansar y las chicas que vivían con ella se habían percatado de eso en un instante. Rebeca, la más fuerte de todos por tener el espíritu de un oso dentro de ella la levantó en sus brazos dejando a la pequeña cabeza de la menor reposar en su pecho. Ya en la habitación de la chica la recostó en la cama dejándola descansar, había pasado por mucho esos últimos días.
-Cateline, debes cuidarla, ella confía más en ti que en nadie más-
-Es cierto, pero no me dejarán sola otra vez, si Todoroki las trajo era para protegerlas, no para perderlas en combate-
-Hermanita, le debemos la vida a ese hombre y no nos vas a detener- sin más divagaciones bajó al primer piso y con unas runas realizadas con su sangre abrieron un portal -Vamos a volver, lo juramos- la seria Cateline liberó unas cuantas lágrimas y corrió hacia sus hermanas para abrazarlas, esperaba que no fuera la última vez que lo hiciera.
-Solo... tengan cuidado- todas asintieron y cruzaron el portal haciéndolo desaparecer al instante.
El viaje duró unos cuantos segundos, las mujeres aparecieron al frente de la mansión y corrieron dentro, habían solo 2 cadáveres, el lugar que antes era conocido por su grandeza y majestuosidad ahora había sido rebajado a sangre y vísceras por todos lados.
-El amo, ojalá esté bien- fueron a donde era su antigua habitación para sacar unas armas escondidas bajo el suelo.
No tardaron mucho en encontrar el lugar donde la pelea estaba sucediendo, debían ser sigilosas por lo que aprovecharon su inmunidad a los objetos religiosos para acabar con los vampiros más apartados del grupo.
En la sala principal el bicolor luchaba contra Aida y otros tres vampiros, estaba acorralado, pero lograba hacer que retrocedieran con sus poderes, ese día los había usado bastante por lo que andaba algo cansado, aún así no se iba a rendir, regresaría a casa con sus chicas y arreglaría las cosas con Momo.
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Holi, se viene la pelea, sinceramente soy muy mala escribiendo una así que haré mi mayor esfuerzo por lo que es probable que me demore para darles un capítulo de calidad, gracias por el apoyo 😊
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Tu vampiro (Todomomo. Todoroki x Momo)
VampireUna chica abandonada es comprada por un muy prestigiado hombre el cual es un vampiro, pero la sociedad no lo sabe; vuelve a la chica su sirvienta que lo acompañará durante su vida, pero al llegar su juventud el vampiro empieza a sentirse atraído a e...