UNA TARDE EN EL BOSQUE CON NADIE

MENSAJE POSTUMO

Si un día no estoy, sea pronto o lejano; no lo descarto,

No estaré lejos, solo me convertiré, (transformare)

Cuando mires al este, en lo alto de los andes, cuando mires la tierra mojada y sientas su olor, yo estaré allí;

Cuando veas esa gota de lluvia corriendo por tu ventana, cuando sientas la brisa helada en tu nariz, cuando se te empañen los lentes con el vapor de la sopa, en todo eso estaré,

En el cielo amenazador cuando veas ese torbellino de colores fríos en las nubes, ahí estaré, y también en el brillo a contra luz de la tela de araña, cuando te deslumbre el tornasol del tordo, veras mi nombre escrito, también en su canto, para que no me olvides, estaré presente en cada detalle que te acompañe. En el brote de los ajos de tu cocina, en el llanto que te provoque la cebolla, en el espino florecido y en el aromo, en los azares tempranos y tardíos, ten presente cuando veas las pinturas de las noches estrelladas, en cada resplandor, en cada reflejo estaré yo;

Después de la lluvia, en cada pastito que me cubre, en las gotas de rocío y en las escarchas del asfalto, en mis estromentos' empolvados, en el sonido, en las olas del mar, en el azul de lo profundo y de lo alto, en el sol y la luna, en el reflejo del agua, mi nombre estará difuminado en las betas del roble, en el vapor de la agüita de hierba que te haces, en todo eso y más;

Cuando los membrillos estén ya amarillos, acuérdate como los comía, mi famosa ensalada de membrillos,

Solo te pido una cosa, a pesar de que tomes tus propios caminos; no me olvides jamás.