Haikyuu one shots

Tanaka Ryūnosuke

Te miraba serio.

-No me gustas- dijo seco, demasiado para tu gusto.

Sabias que podía ser alguien serio y con cero tacto, pero no pensaste que fuera tan... así.

No eras una persona que lloraba mucho, por lo que solo suspiraste.

- Siento haberte hecho perder tu tiempo- te disculpaste con un semblante serio, pero por dentro enserio estabas dolida.

Diste media vuelta y te fuiste bajo la atenta mirada de Tsukishima.

Te gustaba desde hace algunos meses y decidiste declarártele para quitarte el peso de encima, aun sabiendo que lo mas probable era que te rechace.

Si, estabas triste, en ti había aunque sea una mínima esperanza de que te aceptara.  

Estuviste varios días triste, y el quipo lo noto, era bastante raro ver a su manager sin sonreír o hacer bromas, pero nadie quiso preguntar por el momento para no incomodar.

- Hasta luego sempais- dijiste sin animo saliendo del club.

Recién habían terminado de entrenar y ya se estaba haciendo de noche.

- Espera T/N, te acompaño- dijo arreglando se mochila mientras caminaba- Esta oscureciendo y no me gustaría que te pase algo.

- Oh, Tanaka- sempai, enserio no hace falta, no quiero molestarlo.

Al escuchar que lo llamaste sempai se emociono, como siempre.

- Ni hablar, tu sempai te acompañara quieras o no, tu sempai te protegerá- dijo con aires de grandeza.

Reíste leve y dulcemente, enserio te caía muy bien Tanaka, siempre te levantaba el animo y te hacia reír cuando mas lo necesitabas.

Él se sonrojo levemente cuando escucho tu risa, aunque tu no te diste cuenta.

- Esta bien, vamos, pero le debo un favor por las molestias.

- Aceptare el favor pero no digas que eres una molestia, porque no lo eres.

En el camino hablaron de trivialidades, pero algunas cuadras antes de llegar a tu casa Tanaka se puso serio. Si, te había acompañado porque estaba oscureciendo, pero había segundas intenciones en eso.

Como ya dije, todos habían notado tu cambio de animo, por lo que los de tercero hablaron con Tanaka para que hablara contigo, ya que eran bastante cercanos y se llevaban muy bien.

- Oye T/N, he notado que últimamente estas como, emm- dijo lo mas calmado y suave posible mientras buscaba la palabra correcta- Decaída ¿puede ser?

Tu solo lo viste y asentiste levemente.

- ¿Quieres hablar de eso? Me gustaría poder ayudarte lo mas que pueda- dijo sincero- No nos gusta verte así, y supongo que a ti tampoco te gusta estar triste.

Suspiraste y algo dudosa asentiste, no estabas muy segura de contarle, no te gustaba cargar tus problemas en alguien mas.

- Emm bueno, la cosa es que me gusta un chico- empezaste algo nerviosa, viendo que tu sempai te miraba y escuchaba atentamente- Y decidí que era buena idea decláramele, para así poder quitarme un peso de encima- empezaste a jugar con tus dedos por el nerviosismo-  Pero cuando me le declare, me rechazo y bueno, eso, además lo veo todos los días por lo que se me hace un poco difícil ignorarlo- suspiraste y subiste la mirada para ver a tu sempai.

Él estaba como en un trance, hasta que reacciono.

- COMO PUEDE SER QUE ALGUIEN TE HAYA RECHAZADO, ERES COMPLETAMENTE BELLA Y SUPER DULCE- grito enojado- ES UN COMPLETO IMBECIL- soltó indignado.