1945 || Kookmin/Vmin

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Jimin cambiaba el pañal del pequeño JungMin. El nene de tan solo cuatro semanas, el nene movía sus piecitos mientras jugaba con un peluche pequeño. Había nacido con cabello negro, una nariz respingada y unos ojos negros como su padre Alfa.

«Jimin le dolía recordar a sus cinco hijos fallecido» Cuando JungMin nació, fue un 21 de octubre del año 1947. Alfa, nació en la madrugada. Fue un día de celebración para todo el país, porque el presidente había tenido un primogénito y Alfa además.

JungMin el heredero.

En la capital se habían realizado las celebraciones para honrar el nacimiento del bebé. Incluso ahora mientras se vuelve el esposo del Presidente a la vez es padre Omega del heredero. Ese nene le ha hecho un poco feliz, solo un poco porque aun le duele en el pecho todo lo que sucedió.

Taehyung había subido al balcón de la habitación, se había encontrado con Jimin dormido cerca de la cuna de JungMin. El bebé estaba a tan solo metros de distancia. Le molestaba, Jimin su ex Omega estaba ahí tranquilo con el cachorro de un nuevo Alfa, mientras que los niños eran violados y abusados. Su mano tiembla al ver la frágil piel del bebé.

Entonces la puerta se había abierto y antes de encontrarlo Taehyung se escondió viendo como el Alfa Jungkook que le había arrebatado todo aquello que amaba. Su familia, su Omega. Se había acostado y abrazado a Jimin de la cintura.

Taehyung sintió como las lágrimas corrían por sus mejillas. Le haría pagar, por todo el dolor que ha causado, por los niños inocentes y le haría pagar de la forma en la que sabe que le dolería...

Con su único hijo. JungMin.

TaeMin ahora es un niño despiadado, ha sido entrenado por el gobierno para que no tenga miedo al apretar un gatillo en el cráneo de un Japonés. Los capitanes del servicio militar le habían dicho que sus padres habían muerto por los Japoneses. Así el menor los mataba como una forma de vengarse. Hoseok, su hermanito que era cuidado por la Alfa Choi. Que fue una madre y Alfa para ellos. TaeMin ya no confiaba en nadie y eran solo el y su hermanito.

No tuvo piedad al apretar el gatillo en los cráneos de aquellos espías japoneses mientras que su hermano Hoseok aplaudía cuando daba en el centro.

«Porque nadie desconfiaba de un pequeño niño indefenso»

Yuri había perdido toda humanidad existente en ella. Su hermana Hyeji otra vez estaba golpeada cuando otro cliente descubrió su enfermedad. Jihoon había sido comprado por uno de esos hombres que lo abusaba. Lo vendieron como si no fuera mas que un simple objeto y se había ido. No sabían si seguía vivo si estaba bien. Se fue y saben que jamás lo volverán a ver. Ella no puede hacer nada, no puede parar los golpes, no pudo salvar a Jihoon. Su trabajo en ese bar de mala muerte es vestir ropa reveladora y bailar en el escenario para un montón de hombres abusadores y depravados.

Esa noche mientras esta sobre el escenario, los gritos se escuchan y los policías entran en aquel lugar, Solo recuerda que unos brazos la abrazaron protectoramente y que había ocultado su cuerpo desnudo con unas mantas. Yuri había sollozado finalmente estaban a salvo.