CAPITULO 22

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La lucha continuo por alrededor de una hora.

Se sentía como si hubiera pasado una eternidad antes de que la batalla terminara.

Cuando el enorme cuerpo del Jefe exploto en incontables fragmentos, nadie tenía

energía para celebrar. Todos o se sentaron sobre el suelo de obsidiana o bien se

acostaron completamente con su respiración entrecortada.

¿Se—Acabó?

Si—Se acabó—

Luego de intercambiar miradas, sentí como la ̳Conexión' entre Asuna y yo también se

cortaba. La fatiga de repente invadió mi cuerpo y me puse de rodillas en el suelo. Asuna

y yo nos sentamos apoyando la espalda el uno con el otro, incapaces de movernos por

un tiempo.

Estábamos vivos—pero cuando pensaba esto, no podía estar feliz por la situación.

Demasiadas personas habían muerto en la batalla, el deprimente efecto de sonido de

personas explotando continuaba resonando a paso constante y pare de contar con el

sexto.

―¿Cuantos—murieron...?‖

Kline, que estaba sentado a mi izquierda, pregunto mientras respiraba con dificultad.

Egil, que estaba recostado en el suelo a su lado con sus brazos y piernas extendidas,

también giro su cabeza hacia mí.

Moví mi brazo derecho para abrir el mapa y luego conté los puntos verdes en el. Reste

eso a la cantidad de personas que estaban presentes cuando partimos.

―—Un total de catorce murieron.‖

A pesar de que yo mismo lo había contado todavía no podía creerlo.

Todos eran guerreros habilidosos de alto nivel, que habían experimentado incontables

batallas. Incluso si no podíamos escapar o curarnos instantáneamente, aun podíamos

evitar sufrir demasiadas muertes si pensábamos en una manera de poner la

supervivencia primero—eso era lo que todos pensábamos, pero—

―...Eso es imposible...‖

La voz de Egil no tenía nada de su usual alegría. Una deprimente tristeza abrumaba a

los sobrevivientes.

Estábamos a tres cuartos de camino—todavía quedaban 25 pisos por despejar. Incluso si

había miles de jugadores aquí, solo unos cientos se tomaban en serio despejar el juego.

Si los siguientes pisos generaban tantas fatalidades como aquí, entonces era altamente

probable—que solo una persona se enfrentara al Jefe Final.

Si eso pasara, el último sobreviviente sería probablemente ese hombre...

Moví mi mirada hacia más atrás dentro de la habitación. Entre todos los que estaban

sentados en el suelo, una única figura vestida de rojo seguía erguida. Esta persona era

Heathcliff.

Por su puesto, el no estaba ileso. Al concentrarme en él, el cursor apareció mostrando su

Sword Art Online Aincrad Volumen 001Donde viven las historias. Descúbrelo ahora