『ＢＡ Ｎ Ｄ Ｏ Ｓ』ᶻᵒᵈⁱᵃᶜ

CAPITULO 32 - Este no es mi cuarto

— TAURO —

Mi cabeza me dolía como nunca antes, sentía como si alguien me hubiera pegado con un martillo repetitivamente. Poco a poco comencé a abrir los ojos, lo primero que me sorprendió fue ver el blanco ventilador en el techo, ya que en mi cuarto no había uno. Gire rápidamente mi cabeza buscando respuesta y como me arrepentía de hacerlo.
Enfrente mío se encontraba Virgo, el chico preciado dormido. Al verlo tan pacíficamente pequeños recuerdos aparecieron en mi cabeza, recuerdos que me gustarían borrar por culpa de la vergüenza que me daban.

Me levante de la cama intentando no molestar ni hacer ruido, me miré al espejo y casi ni me reconocí por todo el maquillaje corrido. Con el menor de los ruidos me fui poniendo la ropa poco a poco y casi como un ninja salí de la habitación sin que nadie se de cuenta

— ¿Buscas la salida? — escuche la voz de un chico a mis espaldas

Al girarme pude divisar a un chico muy parecido a Virgo, por lo que pude deducir que era su hermano.

— Si, ¿me podrías decir donde es? — pregunto yo com vergüenza

— Te diría pero no creo que puedas salir sin una llave. — dice el riéndose mientras yo me moría de la vergüenza por dentro

El chico me acompañó hasta la salida, yo me despedí rápidamente y agradecí que la situación no fuera más incómoda.
Ya a fuera saqué mi celular y llame a la única persona cerca que sabía que tenía auto y que no tenía problemas de llevarme a mi casa.

— ¿Hola? — una voz femenina me contesto

— ¿Hola? ¿Está Acuario? — pregunto yo con gran confusión

Del otro lado hubo un gran silencio y yo no lograba comprender nada, es como si hoy todo el mundo decidió ponerse de cabeza.

— ¿Quien habla? — pregunta Acuario con su ronca voz

— Tu mejor amiga

— ¿Geminis?

— Agh te odio. — el ríe desde la otra línea

— ¿Que quieres Tau?

— ¿Me podrías llevar a mi casa?

— ¿Donde estas? — pregunta el com preocupación

— En lo de Virgo, más específicamente en la vereda enfrente de la casa de Virgo.

— Agh ya voy, espérame.

ESCORPIO

— Voy a llevar a Tauro a su casa, ¿quieres venir? — escuchó decir a Acuario

— Okey, pero me tengo que cambiar. — digo mirando mi ropa que se encontraba por todo el suelo

El me sonrió y me dio un pequeño beso para luego ir hacia donde creo yo que era el baño.
Yo me levanté y poco a poco fui poniéndome la ropa de ayer y también un sweater de Acuario que me había dado ayer.

— ¿Vamos? — pregunta el desde el marco de la puerta y yo asiento

Salimos de la casa de Acuario a paso lento, el arranco el auto y manejo unas pocas cuadras hasta llegar donde estaba Tauro.
La chica estaba tirada en la vereda y al vernos solo se sorprendió pero aún así no dejo de lado su cara de tristeza. Tauro se subió al auto en la parte de atrás y solamente se recostó.

— ¿Ese idiota te hizo algo? — pregunta Acuario enojado

— Virgo no lastimaría ni a una mosca. — digo yo defendiendo a mi amigo