LOS ANGELES DUERMEN

Capitulo 14

No hay padres perfectos

Luego de mucho tiempo nació Dylan, sentía la misma emoción que cuando tuve a Aine, me sentía afortunada, me sentía orgullosa, me hacia sentir grande.

Aine estaba muy feliz de tener a su hermanito en casa y poder jugar con el. Era maravilloso el poder verle responsable y dedicada. Cuando escuchaba llorar a su hermanito en plena noche, se levantaba de inmediato para poder calmarle, ella y su padre se inventaron el lema "los ángeles no duermen" para mi era maravilloso el poder observarles así. Podía sentir que nuestros sueños se habían hecho realidad, que estábamos completos, que ahora tendríamos que seguir adelante y mantenernos unidos.

Esos tres eran mi mundo y sentía que lo tenia todo con ellos, que no faltaba ya nada.

Aine y Dylan fueron creciendo inseparables el uno del otro, era como si se necesitaran para todo. Había un amor en ellos indestructible, fuerte y eterno, crearon un lazo que ni Yeinz, ni yo podríamos deshacer.

Yo no entendía lo que vivían mis dos tesoros, nunca había experimentado un sentimiento de hermandad ni siquiera sabia que significado tenia.

Yo crecí sola, siendo Hija única, mis padres me daban todo su cariño y no compartía con nadie. Jamás tuve amigas, crecí en absoluta soledad y fue tiempo después que Yeinz apareció en mi vida, haciendo algo por mi que jamás ningún otro había hecho, enseñarme el significado de amistad.

Creo que al no tener una figura a mi lado para compartir, crecí siendo egoísta y un poco egocéntrica. No quería que mis hijos vivieran de la forma en que yo lo hice, me preocupaba su desarrollo mental.

Cuando al fin eres padres te das cuenta que no eres perfecto, aunque te hallan hecho creer eso. Te das cuentas de los errores cometidos por tus padres, aun cuando los vistes como el mejor ejemplo. Ellos trataron de criarme lo mejor que pudieron y sus frutos no eran malos, pero no eran perfectos. Cuando veía a Jared y a Yeinz me daba cuenta que tampoco eran perfectos, que tenían diferencias en su manera de pensar y actuar, me preguntaba ¿Cómo se puede ser tan diferentes si crecieron bajo un mismo techo? y mientras mas vuelta le daba a esta pregunta sin poder contestarla con certeza, me di cuenta de algo importante, No hay padres perfectos.

No hay padres perfectos, pero si padres que intentan que sus hijos no cometan los mismos errores que ellos cometieron. Que tratan de suplirte en todo aquello que no se les pudo dar a ellos. Que son capaces de sacrificar sus propias vidas, para que sus hijos puedan tener una mejor. Que se vuelven de hierro para recibir todos los ataques que puedan venir en contra de sus hijos. Los padres son una maravilla, son un misterio y serán siempre un enigma para aquellos que no puedan tener la dicha de ser padres, por mucho que un padre trate de explicarle lo que se siente.

No hay padres perfectos, porque es un camino al que nadie te puede guiar, porque no importa cuantos hijos tengas, cada uno es un camino diferente, con diferentes matices, diferentes retos y por el cual tendrás que pasar. Pero como pasa casi con la mayorías de las personas, algunas deciden irse por el camino mas fácil, sin prestarle mucha atención a los otros caminos, aquellos caminos que también necesitan que los anden, que también necesitan que los observen y que también necesitan que descubran su belleza única, eso que los hace diferente a los otros caminos.

Quizás esos padres fallan porque descubrieron que algunos de sus hijos le brindaban un camino mas fácil de andar, un camino que les recordaba al propio camino que fueron algún día y el cual sus padres no dieron tanta importancia. Algunos padres eligen el camino de diferentes formas, conscientemente o inconscientemente.

Pensaba mucho que algunas personas merecían ser padres y no podían, y otras podían ser padre pero no se lo merecían. Pero cuan equivocada estaba...

¿Por que este pensamiento estaba errado?... Simple, porque es una de las mejores sensaciones del mundo. Y todo aquel que quiera ser feliz solo tendrá que ser Padre.

Todo eso lo comprendí con mis hijos, con mis dos hermosos hijos y solo esperaba que Yeinz se diera cuenta por si solo de eso.

Pese a todos los malos ratos que pudiésemos haber pasado Yeinz y yo salíamos victoriosos de nuestros obstáculos.

Empezábamos a tener problemas mas fuertes en nuestra relación, pero tratábamos de superarlo con todas nuestras fuerzas para poder estar juntos, en fin de cuenta nos amábamos

Pero hay personas que son fuertes y otras que no lo son tanto, lamentablemente todos tenemos nuestros limites.

Y yo estaba por descubrir eso.